Blue Demonflower

Parte 4: Los deseos de una raíz

Era el último día en que estaríamos en el palacio del príncipe Sei, cuando estaba desayunando con Koujaku en la ciudad y le comenté lo que había visto en mi sueño.

-¿Que viste a tu demonio? - me miró sorprendido.

-Sí, además me dijo una advertencia sobre el príncipe y su mayordomo... Después de eso, me había levantado muy temprano y cuando estaba tomando aire vi algo extraño en el cuarto del príncipe... Pues-

Cuando estaba apunto de decir lo que vi a Koujaku, apareció alguien inesperado.

-¿Qué tal señores Aoba y Koujaku? - apreció Clear, de la nada.

-¡¡Señor Clear!!, ¿qué hace usted aquí, en la ciudad?

-Pues, fui a comprar unas hierbas para mi señor.

-¿Uncaria tomentosa y nelumbo lucífera...? - dijo Koujaku al ver las hierbas que tenía Clear en sus manos.

-¿Ah? ¿qué dices Kou?, no entiendo...

-Uña de gato y flor de loto - explicó Clear - eso es lo que dijo el señor Koujaku.

-Ahhh... debiste comenzar por ahí ¿no, Kou?

-Lo siento, es mi costumbre.

-¿Y para qué es eso, señor Clear?

-Son para hacer un medicamento especial para mi señor. Bueno, me tengo que ir, hasta luego señor Aoba - y se marchó.

Mientras veíamos al señor Clear marcharse, Koujaku comenzó a actuar raro, luego susurró en mi oído.

-Está muy sospechoso... debemos irnos pronto posible.

-¿Por qué?

-Presiento que algo malo nos pasará si nos quedamos por más tiempo.

Sabía que, cuando Koujaku presiente algo si llega a ocurrir lo que dice. Así que, siempre le hago caso en estos casos. Volvimos al palacio para recoger nuestro equipaje y estábamos pasando por el cuarto del príncipe Sei cuando oímos un grito atroz desde aquella habitación.

-¡¡Mi señor !!! ¡¡Resista, por favor!!

Entramos inmediatamente al cuarto y vimos que Sei estaba tirado en un charco rojo, al darme cuenta de que era su sangre comencé a sentir mareos y estaba apunto de desmayarme; Koujaku al verme en ese estado me sujetó y preguntó a Clear.

-¿Qué sucede aquí? ¿por qué está el príncipe sangrando en el suelo?

-Es una prueba para su cuerpo, debe aceptar el nuevo corazón para expulsar el otro... - parecía estar calmado, pero veía la desesperación en sus ojos.

-¡¡Ayúdale!! - gritó Koujaku - ¿Quieres salvar a tu amo o no?

Koujaku dio instrucciones a Clear para que el príncipe Sei y después de varios minutos pudo detener el sangrado, pero aún seguía agonizando. Clear, en la mayor desesperación decidió hablar.

-Es mi culpa... Yo soy el que le ocasiona ese dolor... Pensaba en sacrificarme, pero al ver la sonrisa de mi señor no pude cometer tal acto...

-¿Qué hablas?

-Pensaba decírselo mucho antes, pero me dejé ocultar... Yo...-

-Eres la raíz, ¿no es cierto? - interfirió Koujaku.

-¡¡Kou!! ¿qué dices?

-No, está en lo cierto señor Aoba... El joven Sei dejará de sufrir si acepta el nuevo corazón, pero parece que hay complicaciones... El último recurso será sacrificarlo...

-¡¡No!! -grité - ¡¡No puedes hacer eso!!

-Aoba...

-Estoy seguro que todo saldrá bien, yo voy a rezar por él, sin importar lo que pase no voy a perder a un amigo...

-Aoba - me tomó del hombro, Koujaku.

Los tres veíamos a Sei en estado de agonía, Clear se acercó a su amado amo y le tomó la mano. También, desde lo profundo de mi corazón rezaba que el príncipe Sei no vaya a morir, entonces sucedió un milagro...