siempre has sido tu (Trilogía Curvas Impredecibles #2)

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* canción en el momento  entre Lucia y trenton *

CAPITULO 9

Mis mejillas cosquilleaban arremolinando una sensación en mi pecho, era innegable que su aroma aún se conservaba en mi memoria, después de sus palabras mis mejillas se habían encendido tanto o más que una caldera hirviendo en pleno fuego, hui de ahí, hui de el en ese vergonzoso momento y él lo permitió. Sabía que el me da mis espacios y de un poco me privaba de mi timidez.

Al llegar a casa después de lo Trenton, todos me miraban intrigados suponiendo que mi madre les comento lo sucedido, y aunque no dije mucho mis padres me dieron mi espacio para asimilar las cosas de forma tranquila.

- Hablaste con él, ¿verdad? – la voz de reproche de Chris no me pasó desapercibida. Se que él no estaba del todo contento.

-Quiero brindarle la oportunidad de remediarlo, jamás lo olvide – suspire mientras cortaba unas fresas para una tarta que haría mi madre.

-Él no es para ti linda – su voz estrangulada llena de rabia momentánea me hizo darme cuenta de la profundidad de sentimientos albergados en su pecho por mí.

-Lo sé, pero le quiero y necesito – lo mire a los ojos aguantando las lágrimas – no de la misma forma que te necesito a ti, ojalá pudiera corresponderte porque se en parte que ese es tu enojo porque

-Porque el me alejara de ti, eres todo lo que tengo, tantas veces Lucia – reprimió las ganas de levantar la voz – tantas veces que te sostenido, justo cuando más necesitabas consuelo, yo quiero algo más que esto y lo sabes – nos señaló a ambos.

Sus ojos tristes como si se dejara vencer me rompieron una hebra, la amistad es un broche que se debe guardar como un tesoro precioso y siento que él y esto nos está fragmentando de manera dolorosa, deje caer mis hombros al sentirme miserable por hacerlo sentir de esa manera, dolía verlo de esa manera, no quería y mi persona lo sabía, mis lagrimas lo sabían. Este día me estaba agotando tanto mental como emocionalmente.

-Ojalá pudiera reparar mi mente y ser todo para ti, pero yo

-No estás rota, no necesitas reparar nada de ti – sentí sus brazos arroparme por completo desde mi espalda, apoyando su mentón en mi hombro derecho – estas perfecta, solo que no puedo llegar a ti de esa forma y me dañaría que lo intentaras si no es mutuo, no soy conformista pero tu amor en amistad es más valioso que una relación, eres mi alma gemela, sin importar que te cases o que elijas a alguien más siempre serás mi persona, mi niña mala cara – beso mi mejilla un montón de veces.

Nadie más que el merece la felicidad y aunque el me reconfortara lloraba y ya no por mi sino por él, no merece tenerme en su vida no cuando no puedo darle algo que ni siquiera es mío en pensamiento.

Mi corazón y mi amor.

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Después de una amena cena y tranquila donde reinaba la conversación en torno al bebe, sabía que madre le diría a mi padre sobre esta tarde y que el en un debido momento me lo diría, pero agradecía que el respetara mi espacio.

Esta noche Chris prefirió darme mi espacio, pero sabía que quería estar solo y asimilar lo que le dije acerca de mis sentimientos por él, debía darle tiempo a que lo comprendiera por tal motivo estaba en mi habitación sola entre mis sabanas rosadas, admirando la luz que entra por mi ventana medio abierta recordando una y otra vez esa cercanía, su voz, sus ojos, ese olor.

Menta y madera con un toque a vino, esa fragancia daba referencia a un afrodisiaco, me hacía reprimir jadeos y eso está fuera de mi radar, mientras que mis labios hormigueaban mi mente me reprendía por ceder y anhelar algo más que su cercanía.