Mientras mi hermano trataba de convencerme de que yo no había tenido la culpa, el miedo y la desesperación se hicieron presentes, iba a vivir por el resto de mis días sabiendo que había matado a alguien y no cualquier alguien si no que el tipo que más había odiado en toda mi vida, ¿Como poder seguir con esto? Cada noche iba a recordar lo que había hecho y tenía miedo de que la policía me atrapara y mi vida se arruinara otra vez por ese estúpido payaso.
-Vamos debemos ir a dormir, dijo Tom casi cayéndose del sueño, eran las tres de la mañana.
-Si...
¡Dormir! ¿Cómo iba a poder dormir? Mientras trataba de hacerlo, todo en mi mente se puso tan claro, recordaba esa escena una y otra vez y luego vernos a mi y a Tom envolviendo el cadáver, mientras yo lo tomaba de sus pies y veía sus horribles y grandes zapatos, recordaba ese cuerpo muerto y pensar en que alguna vez fue Alfred Parker, un hombre despiadado que sólo buscaba vengarse de mi, una venganza que bien valía la pena o no, lo mejor hubiera sido que me hubiera matado él a mi, antes que tener que estar con esta angustia y este horrible pesar...
La sensación con la que me levanté esa mañana fue con la de haber tenido una horrible pesadilla y despertar, pero no había sido una pesadilla, fue algo real y que yo había hecho, las lágrimas de dolor no cesaban y Tom llegó de inmediato a darme un cálido abrazo.
-Tom, ¿Que he hecho? Soy una asesina.
-No lo eres, eres una homicida.
-¿Que?
-Los homicidas son los que matan sin haberlo premeditado, tú cometiste un homicidio, un acto involuntario y todo para salvarme, hermana no te sientas así, ese payaso nos hubiera matado a los dos, tú eres una heroína.
-Matar no es heroico Tom, pero tienes razón, él te hubiera matado y a mi también, hasta a Megan y a papá si hubieran estado, así de malvado era.
-¡Vez! Tienes toda la razón, ahora sólo debemos suplicar que no encuentren el cadáver.
-Debimos haberlo enterrado o quemado.
-No podrán encontrarlo en ese barranco, ya verás.
-Ojalá que no...
-Levantate y cambia esa cara, si papá te ve así vas a preocuparlo.
-Esta bien... Vamos.
Me di una ducha fria para tratar de despertar, quería que el agua borrará todo incluyendo mis lágrimas pero jamás iba a borrar la culpa, debía recuperar la compostura porque de verdad no quería poner mal a papá.
Después de bañarme me fui al comedor, ya estaba listo el desayuno pero no tenía hambre, papá leía el periódico y me saludó con entusiasmo.
-Buenos días hija, come antes de que se enfríe.
-Buenos días papá.
-Tom, me haces el favor de ir a traer a Megan, te daré la dirección.
-Yo conozco pa, no te preocupes.
-¿Puedo ir?
-Esta bien hija, yo iré a trabajar.
-Papá es sábado.
-Si pero mientras este aquí tu hermano quiero aprovechar, además van a pagarme bien y necesito ahorrar para tu Universidad.
-Es cierto... papá odio que gastes, debería trabajar.
-Nada de eso, tú vas a estudiar, además irte a la Universidad será bueno, vas a aprender mucho y ese payaso no te molestará más.
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Yo odio a los payasos [#Wattys2015]
Horror¿Le temes a los payasos? Entonces no leas esta historia...