𝒓𝒊𝒈𝒉𝒕 𝒑𝒆𝒓𝒔𝒐𝒏, 𝒘𝒓𝒐𝒏𝒈 𝒕𝒊𝒎𝒆 - joseph quinn

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Ya han pasado 3 días desde la noticia. No cabía en mí de la felicidad.

Para haber tenido unos padres tan trotamundos como los míos, yo en comparación, el lugar más lejano al que he ido, ha sido a Londres en un viaje de fin de curso.

Estaba deseando empezar esta nueva etapa; conocería gente nueva, visitaría lugares impresionantes, mejoraría mi inglés, aprendería muchísimo de mi trabajo, y bueno, para qué mentir, tenía muchas ganas de conocer al elenco de la serie. Sigo Stranger Things desde que se lanzó en 2016, y prácticamente ha estado creciendo conmigo desde los 19 años.

La principal razón por la que me escogieron fue porque mi profesora del curso hizo una amiga en sus prácticas, Amy, la que ahora es la jefa de maquilladores de la serie desde que esta se estrenó. Le mandó personalmente una carta de recomendación junto con mi portfolio, y bueno, parece ser que la convenció.

Tras enterarme de la maravillosa noticia, me puse en contacto con la que sería mi jefa durante los próximos meses, e hicimos una video llamada para que me explicase cuando empezaríamos.

Debía estar en Atlanta el lunes por la mañana, lo que quería decir que el domingo a la madrugada debía coger el vuelo, ya que son más de 10 horas de trayecto.

- ¿Y has cogido el cargador del portátil? -grita mi madre desde la sala de estar. -

- Sí, mamá.

- ¿Y el líquido de las lentillas? -se vuelve a escuchar. -

- Sí. -respondo en el mismo tono. - Mamá, de verdad, ya lo tengo todo. -salgo entonces de mi habitación con la maleta y el bolso de mano. -

- Ay Vera, ten muchísimo cuidado. -sigue hablándome, ahora con un tono más tranquilo, mientras dejo todo el equipaje en la entrada de la casa. -Tu padre y yo vivimos en Chicago durante 3 meses y la gente estaba un poco... Desquiciada, digamos.

- No creo que tenga mucho tiempo para salir por ocio, estaré la mayor parte del tiempo en rodaje, así que no tenéis de qué preocuparos.

- Espero que me consigas un autógrafo de Winona Ryder.

- Sí papá, eso dalo por hecho. -reímos. -

- Bueno, y si a mí consigues que Sadie Sink me mande un saludo estaría genial. -deja caer Duncan, mi hermano. -

- Bueno, ¿queréis algo más? -termino de recoger unas cosas para meterlas en la mochila. -

- Sí, que nos llames en cuento puedas y nos vayas contando como te va todo. -se acerca mi madre para darme un abrazo. -

- No os preocupéis, haremos llamada todos los días que pueda. -me separo de ella. - Bueno, creo que me debería ir a dormir ya, en menos de 5 horas tengo que coger el avión y quiero descansar un poco, os quiero.- me despido de ellos con un beso en la mejilla a cada uno, y vuelvo a mi habitación.-

Puse la alarma a las 5 a.m., enchufé el móvil al cargador, y me recosté sobre la almohada.

Me quedé como en trance durante unos minutos pensando en todas las cosas que iban a cambiar a partir de mañana. Y perdida entre estos pensamientos, acabé por quedarme dormida.