~Capítulo 2~

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🌼🌼🌼

-Sueltalo-sentencia en tono serio una voz profunda proveniente de un hombre de traje negro que teía una mirada intimidante, tomando el brazo del hombre desconocido para que soltara al rubio.

-¿Y tú quién te cree?-respondió el mayor tratándolo de soltarse del agarre

-Soy su guardaespaldas, me lo llevo, si no lo soltará tendrá problemas- Mencionó el de traje negro haciendo que el contrario soltara al chico.

El hombre de negro tiró a Jimin sacándolo lejos del extraño y otras miradas aunque el rubio explotó de resistir.

-Oyee~ tú, ¿te mandó mi padre?~, noo te conozco~ ¡que aguafiestas, suéltame! menteeess~- se quejó el rubio entrecerrando los ojos señalándolo con su pequeño dedo índice, al de traje negro se le hizo una imagen muy tierna ya la vez graciosa.

El rubio siguió tratando de soltarse y safarce del agarre, en un intento tropezó estúpidamente con su propio zapato saliendo del bar, iba a caer cuando el pelinegro lo agarró duro quedando ambos mirándose a los ojos.

-~Oyee~ yo te conozzco~- dijo en un susurro el rubio agudizando su vista para poder enfocar mejor aprovechando la reciente cercanía ya que todo se movía a su alrededor, sonrojándose un poco más de lo que ya lo tenía el alcohol -Oyee guapo~ no te gustaría bailar un poco~- coqueteó tomando la corbata del pelinegro de forma peligrosamente seductora.

-Nos vamos- respondió serio parando correctamente al rubio, aunque este no podía caminar tan bien de lo mareado que estaba.

-Y... ¿adónde me llevas guapo?- dijo con una sonrisa traviesa- ¿a un hotel?

-Si- respondió seco el pelinegro.

-¡Oh enserio!, que apuesto- siguió diciendo el más bajito entre risas mientras enganchaba su brazo con el del mayor para sostenerse al caminar.

siguió caminando por la calle, y el rubio no dejaba de hablar, aunque el pelinegro no le entendía ni la mitad de lo que decía, era muy confuso y de un tema se saltaba a otro, enredaba las palabras y para empeorar estaba empezando a decir expresiones en inglés y tal vez en arábe porque no le entendía, definitivamente estaba ebrio.

Después de una media hora llegó a uno de los famosos hoteles de Seúl, el mayor pagó una habitación con cama doble para una noche, le entregaron las llaves y el rubio no dejó de sonreír traviesamente; entraron a la habitación y Jimin cayó sentado en la cama un poco cansado.

-¿Entonces vienes guapo?- Preguntó el rubio haciendo círculo con su dedo índice sobre la sábana de la cama, se vio tímido pero a la vez coqueto.

-No puedo bonito, yo me tengo que ir- enseguida la carita del rubio pasó a una expresión sorprendida y un poco desilusionada- descansa, vuelve mañana a tu casa temprano, tu padre debe de estar preocupado -dejó las llaves de la habitación en una mesita al lado de la puerta-hasta la próxima.

¿mi padre? el ni siquiera piensa en mi .- pensó el rubio enfadado con la orden.

-¡Oye como te atreves!- gritó al ver al pelinegro darse la vuelta- ¡vuelve! ¿para que pediste una habitación para dos con cama doble si me ibas a dejar solo?- siguió haciendo un berrinche.

-para que estuvieras más cómodo, no llores como un niño pequeño, eres grande, duérmete, adiós.- terminó para luego cerrar la puerta.

El pequeño bufó molesto, se sintió estafado, se tiró en la cama inconforme tratando de calmarse y conciliar el sueño, pero estaba enfadadísimo, aparte no dejaba de pensar en el sermón que le daría su padre al llegar, era la misma rutina, en definitiva no quería volver, al final quedó dormido por el cansancio que tenía, la estrella que bailó casi toda la noche tenía que descansar.

Jimin caminó suavemente por la alfombra, eran las 6 de mañana y estaba teniendo cuidado de no toparse con nadie, acababa de llegar a la casa, se había levantado porque había tenido una horrible pesadilla en la que un hombre gordo y mayor bailó con...

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Jimin caminó suavemente por la alfombra, eran las 6 de mañana y estaba teniendo cuidado de no toparse con nadie, acababa de llegar a la casa, se había levantado porque había tenido una horrible pesadilla en la que un hombre gordo y mayor bailó con el y por estar tan ebrio casi se lo lleva a una habitación, raramente se sintió muy real, pero tenía tanto dolor de cabeza y no quería pensar en eso.

Entró a su cuarto haciendo el mayor silencio posible al cerrar la puerta, al girarse se topó con la mirada preocupada de Sunny que hechó correr a abrazarlo.

-¡Señorito! ¿dónde rayos estabas? ¿sabes lo preocupada que me tenías? ¿volviste a escapar? ¿a dónde fuiste? ¡y sin avisarme! tu padre está molesto, muy molesto , ¿estás bien? ¿Ya dormiste? ¿haz desayunado algo?- dijo apresuradamente y Jimin estaba apenas procesando el día de ayer.

-Sunny calmate y haz silencio por favor.

-si perdón pero- fué interrumpida por Jimin antes que lo volviera a bombardear con preguntas.

-No te preocupes, una cosa a la vez por favor, tengo rezaca.

-¿entonces si escapaste y te fuiste a una fiesta de nuevo?

-si, y si dormi anoche.

-¿Dónde?- preguntó insistentemente.

-En un hotel, pero no dormí bien así que quiero tomar una siesta, perdón por no haberte avisado que saldría.

-Está bien pero a la próxima avísame, ¿te prepara algo de desayunar?- preguntó la mujer sonriéndole dulcemente ya más calmada.

-No gracias, tengo náuseas aún voy a dormir un poco ¿si?- dijo Park sentándose en la cama tomando suavemente su cabeza.

-Esta bien, luego ve a la oficina de tu padre, quiere hablar contigo, y si quieres luego baja a la cosina te daré una pastilla para la resaca ¿bien?

-Muchas gracias Sunny.

-No se preocupe joven sabe que estoy para servirle.- dijo amablemente antes de salir del cuarto.

-Sunny una cosa más.

-¿si?

-Deja de ser tan formal llevas conmigo años trabajando eres como una madre para mí ¿sí?

-Claro joven Jimin lo tendré en cuenta.- mencionó de nuevo usando el "usted" y no el "tú", Jimin la miró serio unos segundos como hablándole con la mirada- perdón, solo Jimin, adiós, entonces que duermas bien.

-Así está mejor, muchas gracias.

La mujer le sonrió amablemente y luego cerró la puerta tras irse, Jimin se dejó caer en la cama y cerró los ojos para descansar, sólo durmió un par de horas, se estaba quedando dormido cuando los recuerdos de la noche anterior volvieron a atarlo: "suéltalo" "¿te mandó mi padre?" "oye guapo".

Los recuerdos eran muy borrosos aún, se sentó nervioso tratando de recordar, ¿a quién le habría dicho guapo?, sus gustos eran muy buenos, y ahora que lo pensaba, no recordaba el como había terminado en un hotel, según el tomó un taxi y se fue, pero cuando despertó e iba a pagar la noche la empleada le había comentado que ya la había pagado, aunque el no recordaba nada, le echó la culpa al alcohol, sólo quería dormir en estos momentos, volvió a echarse en la cama no sin antes poner una alarma en su celular para que lo despertase en dos horas, dejo su celular en la mesita de al lado de su cama y se quedo dormido, todavía estaba mareado y enserio quería descansar. 

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Nota de la autora🏷️:

Hola mis queridos lectores, me disculpo por haber estado inactiva🙏 por eso traté de hacer el capítulo un poco más largo.

pero para recompensarlos pensé en hacer maratón ¿qué les parece? :3

No se olviden de votar para el proximo capitulo.

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