Capítulo 14

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Me levanto porque siento un calor fuerte en mi espalda, abro los ojos y puedo ver que es la mañana, luego miro al techo y me percato que no estoy en mi habitación. Entonces intento pararme per un brazo rodeado en mi cintura me lo impide, volteo a ver y está Dennis dormido.

Busco mi teléfono en la cómoda y veo que son las 11 am y mis ojos se abren como platos.

Rayos, no llegue a la casa.

Tengo llamadas perdidas tanto de Sebastian y Julian.

Me van a matar.

Decido despertar a Dennis, hace un leve gruñido para luego verme y sonríes.

-Buenos días- dice con voz ronca.

-Tardes casi diría yo. Dennis necesito regresar a casa- le digo.

-Diablos, ¿nos quedamos dormidos? - dice cuando se levanta y puedo ver su torso desnudo.

Dios mío santo.

Me volteo por inercia y empiezo a ponerme los tenis.

-Te espero afuera- le digo y salgo.

———

De camino a la casa no puedo ni imaginar de todas las cosas que me dirán tanto Sebas como Julián, de seguro mi papá ya sabe, pero me sorprende que no me halla mandado mensaje.

De igual manera Charles y Arthur entonces eso solo hace que empeore las cosas y me sienta más nerviosa de lo normal.

Después de unos minutos llegamos y para mi sorpresa están Julián y Sebastián afuera de la puerta de la casa. Puedo observar cómo Julián camina de un lado para el otro mientras que Sebas solo está inclinado en un pilar mirando hacia la nada.

Bajo del coche y junto a mi Dennis.

Cuando los ojos de Sebas como de Julián se posan de mi. Puedo ver cómo se alegran de verme. Primero es Julián que llega hasta mi con grandes zancadas y encararme.

Aquí vamos.

-¿Dónde demonios estabas?- me dice enojado.

-Estaba conmigo- Dennis interrumpe.

-No te pregunté a ti- lo fulmina con la mira.

-¡Oye! Tranquilo. Solo estábamos pasando un buen rato. Me llevo a un lugar donde rentó una van, pasamos el tiempo ahí y nos quedamos dormidos- justifico.

Puedo ver cómo la mandíbula de Julián se en suaviza.

-No lo vuelvas a hacer nunca, tienes suerte de que no llame a tu padre solo porque Sebastián me lo pidió- me dice alterado.

Volteo a ver a Sebastian quien se posa a lado de Julián, pero a comparación de él se ve tranquilo de lo normal y me da miedo.

-Sí, lo lamento- agachó la cabeza.

Espero el regaño ahora de Sebas, pero el solo se queda callado mirándome.

-Será mejor que me vaya- me dice Dennis y yo asiento con la cabeza.

Me da un beso rápido en la mejilla y se marcha.

El rey de Zandvoort Onde histórias criam vida. Descubra agora