Entrenos

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Tarde del 7 de julio de 2021

-¡Venga chavales, ahora hacemos unos rondos!

Luis Enrique se había bajado de su torre y en esos momentos dirigía el entrenamiento desde el césped.

Pedri, Eric, Mikel, Dani y Rodri estaban metidos en un grupo y se pasaban el balón unos a otros en el rondo. Después ensayaron los lanzamientos a puerta ante Unai Simón, Robert Sánchez y David de Gea.

Ferran tomó impulso y lanzó con fuerza. Robert le detuvo el tiro. Después siguieron Marcos Llorente, Koke, Álvaro Morata, Mikel Oyarzabal, Aymeric Laporte...

Unai Simón detuvo varios lanzamientos. Se le notaba más seguro que días atrás, y eso era importantísimo para el equipo.

-¡Vale, chicos! Hemos terminado por hoy-avisó Lucho.

-¡Muy bien tío, estás que te sales!-le dijo Eric García a Unai.

-Gracias, lo hago lo mejor que puedo, pero siempre hay un margen de mejora-soltó el portero.

-Chavales, ¿contra qué equipo pensáis que nos enfrentaremos en la final?-preguntó Ferran-Yo digo Inglaterra.

-Yo también lo creo-dijo Eric.

-Pues yo veo más a Dinamarca-indicó Pedri.

-No lo sé-dijo Unai-Semifinal muy igualada.

-Yo pienso que será Inglaterra-soltó Álvaro.

Este entrenamiento había sido a puerta cerrada, sin medios de comunicación, y los chicos lo agradecían, en parte porque así estaban más relajados, disfrutando de una mayor concentración, ya que el día de ayer fue complicado. Aunque en realidad llevaban alrededor de un mes viviendo momentos duros. El míster siempre había salido en defensa de sus chicos en las ruedas de prensa, y entre unos y otros se arropaban. Y pese a que había sectores de la prensa y afición bastante críticos con ellos, también existía muchísima gente que iba con ellos a muerte. 

Una de ellas era Paula, la redactora de El Graderío. Ella siempre decía que no era objetiva del todo, por ser fan de la selección, y que no sabía si la tomarían en serio. Aunque lo intentaba, escribía sus crónicas lo más pegadas posible a la realidad, sin emitir muchos juicios personales. Algunos compañeros de profesión la acusaban de ser demasiado "blandita" con los jugadores.

-Mi padre dice que elegí mal el oficio-soltó ella una vez entre risas-Dice que tendría que haber fundado una peña y viajar con ella por todo el país animando a la selección, que no valgo para criticar, que los aficionados al fútbol no tendríamos que dedicarnos al periodismo deportivo...

-Bueno, yo creo que lo más importante es que tú seas feliz con lo que hagas. La gente siempre va a hablar, así que...¿qué más da?-dijo Gerard Moreno-A ver, yo soy jugador de fútbol, pero tampoco creo que sea obligatorio poner a caldo absolutamente a toda la gente con la que te cruces...no pienso que eso sea periodismo real...es sensacionalismo barato.

-¡Exacto! Yo es que no soy así...me sentiría una vendida y una falsa...

-Sigue tu propio camino y confía en la intuición, nunca falla-aconsejó el delantero.

Volviendo al presente, los chicos estaban en los vestuarios , las duchas, cambiándose de ropa y aseándose tras la jornada de entreno. Hacían bromas entre ellos y también con los utilleros del equipo.

-¡Paco, ven, mira, hemos hecho el juego del Twister con prendas! Jajajaja-se reía Jordi Alba.

-Uy, madre mía-dijo el utillero.

-Y como ruleta usamos esta botella y los dibujos que nos hizo Raul de Tomás para que no le olvidemos este verano-dijo Dani Olmo señalando el objeto en cuestion-Carlos, te dejamos que hagas los honores.

Carlos era uno de los masajistas del equipo, y acostumbrado a las bromas que se hacían allí dentro se partía de risa viendo la escena.

-Muy bien...a ver...uy ¿eso qué es lo que es?

-Un pie-indicó Álvaro.

-Vale, pues pie izquierdo al rojo, Jordi.

Se volvió a girar la ruleta.

-¡Eric, mano derecha al amarillo! ¡Unai, pie derecho al azul!

Más giros de ruleta después...

-Rodri, pie derecho en el verde, Pablo, mano izquierda al rojo y César, gírate para plantar el pie izquierdo en el amarillo...

-Está difícil eh...-dijo el defensa del Chelsea entre risas-¡Uy! ¡Me caigo!

Media plantilla del equipo español estaba tirada por los suelos muerta de la risa.

-Jajajaja...

-Pero bueno, ¿qué cachondeo es este?-preguntó Luis Enrique entrando en el lugar.

-Ay, míster, lo sentimos, pero es que tenemos mucha tensión encima...en concreto a Rodri, que cayó encima de mí y me está aplastando, jajajajaja-Dani Olmo estalló en carcajadas.

A Lucho se le escapó media sonrisa.

-Ay, picarones...la madre que os parió...¡Vicente, despéjame el vestuario que me tengo que llevar a esta tropa!

-Ya habéis oído al jefe-dijo Vicente, otro de los utilleros-¡Desfilando!-exclamó mientras trataba de levantar a Álvaro del suelo.

Los jóvenes se ponían de pie entre risas mientras iban abandonando el lugar con sus cosas y se dirigían hacia el autocar. En el camino de vuelta al hotel, Luis Enrique les propuso hacer una porra (escrita) con el resultado de la otra semifinal entre Inglaterra y Dinamarca. Hubo un empate, la mitad de la plantilla (y cuerpo técnico) iba con los ingleses, y la otra mitad con los nórdicos. Los que fallaran el resultado invitarían al resto a una cena.

Héroes de WembleyWhere stories live. Discover now