montaña dafan

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A-yuan miraba a su alrededor,sentía algo extraño en ese pequeño pueblo a los pies de la montaña Dafan, la ciudad fojiao. No muy lejos de la villa Mo allí encontraron un lugar para descansar hasta que terminaron despertándose en pleno amanecer una media hora antes de su horario habitual. Cierta molestia les pasaba por esto pero entendían que esa hiba a ser una razón de estar lejos de casa.

Escucharon rumores e historias de la montaña y con su bolsa qiankun inquieta luego de comer decidieron revisar esa montaña, en la punta de este yacía un templo a una doncella mientras analizaban los alrededores antes de subir a la montaña se encontraron a una joven, algo extraña. Sonrieron y saludaron al pequeño grupo de viajantes mientras evitaban reír ante la escena de la mujer mayor y la joven. Zhaotā acercándose a su hermano jalandole de la manga, hablando bajo solo para que el grupo pudiera escuchar.

- como tú, con la abuela wen, gege

- calla

Rieron por ello al fin subiendo la montaña luego de haber recibido otra historia más sobre el templo de arriba de esta. Sizhui quedándose atrás del grupo hasta que sintió una sensación extraña haciendo que mirara a su alrededor, una ráfaga de viento rápida y vio reflejos de tres tunicas que podía reconocer como los jóvenes agradables de la noche anterior y claro el interesante integrante de la secta Jin. Pero la risa que había soltado al ver aquello y su paso que había sido reanudado se detuvo de golpe al recordar a su guardian.

Miro alrededor buscándole,chasqueo la lengua al reconocer su silueta, al no poder tocar su flauta por dichos intrusos, silbo. Silbo tan fuerte, una hermosa canción,y el sonido que era amplificado por el eco que le rodeaba alertando a su hermana que se encontraba al frente del grupo, está apretando su espada pero sin voltearse a ver sabiendo que algo pasaba.

"Quédate lo suficiente lejos, busca un refugio y quédate ahí hasta que te llame, hay gente siguiéndonos, mantente a salvó"

Se detuvo al dar su orden y ver qué ya esa silueta no estaba, todos en el grupo respiraron con alivio viéndole de reojo a él y cuando lo noto solo sonrío así calmando a todos mientras seguian su caminata hasta la cima de la montaña viendo cada vez más el templo de dicha doncella.

- que crees que hacen... Realmente estás seguro que...

Hablo el joven Ouyang lo más bajo que pudo tras unos árboles hacia sus otros dos acompañantes siendo callado por él de blanco mientras que el otro prestaba mucha atención a lo que hacían el grupo.

Al estar ya enfrente del templo revisaron los alrededores y luego abriendo las puertas entrando levemente al templo se quedaron al nivel de las puertas contemplando la gran estatua y su forma en si, la admiraron por un momento y le rindieron respeto antes de entrar por completo y revisar el resto del mismo lugar hasta que encontraron una escritura en una tabla así Sizhui tomándola sin entender lo que decía en esta. La soltó y volvió a la puerta viendo detrás de los árboles. Sonrío haciéndoles una seña mientras se recostaba en el marco de las puertas.

- jóvenes maestros Jin,Lan y Ouyang porque aún siguen ocultandose... Estoy muy seguro que se dieron cuenta de que ya sabíamos que nos seguían... Así como más atrás hay más discípulos Jin y Lan buscándolos... Su sectas no son muy buenos a la hora de ser cautelosos no creen...

Sonreío más al ver a estos tres saliendo de su escondite mientras miraban a su alrededor.

- aún no han subido la montaña, siguen algo lentos...

Pero su sonrisa dirigida a los jóvenes ligeramente avergonzados al frente de él se borró al recordar algo. "La cognición espiritual de su tío" y cuando su hermana se acercó a el gritando que había encontrado algo se apresuró a poner su mano sobre su boca para callarla haciéndole una clara señal de que no debía gritar. Con la piel erizada y ante la mirada espectante de todos sobre el soltó a su hermana acercándose a la estatua con el ceño fruncido, una doncella que parecía estar bailando, los acontecimientos que estaban ocurriendo y el propósito principal del cual habían salido de su secta, y ahí lo noto. Y estaba muy seguro de que esa estatua había sido encerrada por sus padres tiempo atrás como así de seguro estaba que la mancha en su cara ya bastante oscurecida era sangre.

El Regreso De Los WenWhere stories live. Discover now