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—¿Qué fue eso?

Freya sabía que se avecinaba esa pregunta y se había estado preparando para ella desde que volvió al jet. Inmediatamente después de ver a Clint acostado en la mesa, dejó que su ira desapareciera y se preocupó por su amigo, pero cuando estaban en el aire se sentó sola en la esquina del jet, tratando de ignorar a todos mientras sentía la ira burbujeando en su estómago.

Steve se acercó y se sentó a su lado—. Entonces, ¿quieres decirme qué pasó?

Freya lo miró y Steve notó que las lágrimas brillaban en sus ojos—. Todos estos años pensé que mis padres me habrían estado buscando. Pensé que habrían estado devastados por perderme. Pero luego descubro que ellos fueron los que me entregaron. Ni siquiera los recuerdo.

—Quizá Strucker estaba mintiendo —dijo Steve esperanzado—. Tal vez solo estaba diciendo eso para molestarte.

—Pero, ¿por qué mentir? —preguntó Freya—. ¿Por qué mentir cuando ya perdió? No lo beneficia de ninguna manera.

—Pero te hizo enojar —dijo Steve—. Y estuviste cerca de perder el control.

—Tenía todo bajo control —respondió Freya—. Solo estaba molesta.

—Lo sé, y tal vez eso es lo que quería —dijo Steve—. Tal vez quería que sintieras tanta ira que simplemente no pudieras manejarla. Te lo prometo, llegaremos al fondo de lo que pasó con tus padres.

Freya suspiró—. No estoy segura de querer hacerlo.

Steve colocó un brazo alrededor de sus hombros, besando su sien mientras la atraía hacia él—. Oye, pase lo que pase, nos tienes a nosotros.

—Los tengo —dijo Freya mirándolo—. Ahora eres mi familia.

—Y tú eres la mía —respondió Steve—. ¿Vas a estar bien?

—Sí, me voy a quedar aquí un rato —dijo Freya en voz baja, mirando al suelo—. Quiero estar sola con mis pensamientos.

Steve asintió, besando su sien una vez más—. Estarás bien, Freya. Lo sé.

Freya le sonrió, observándolo levantarse y dirigirse hacia Thor y Tony. Durante el resto del viaje, Freya los escuchó hablar sobre el Cetro y la fiesta para celebrar su victoria, pero apenas les prestó atención. Estaba demasiado perdida en sus propios pensamientos, luchando por examinar los confusos recuerdos de su tiempo antes de HYDRA y Strucker.

Podía ver dos rostros, tal vez sus padres, pero estaban borrosos y no podía distinguir rasgos específicos. Todo lo que recordaba era el día en que Strucker comenzó a experimentar con ella y todo lo demás antes de eso estaba perdido; suprimido por el trauma de los años que siguieron.

Ver a Strucker había sido una sacudida para su sistema. Pensó que estaba preparada, pero mirar la cara del hombre que la había torturado durante años y continuaba atormentando sus pesadillas era algo que uno no decide superar. Freya todavía estaba aterrorizada de que le volviera a pasar algo así, y al mirar a Strucker lo había recordado todo.

Cuando el jet aterrizó en la Torre de los Vengadores, Freya fue la primera en irse. Steve la alcanzó cuando bajaba del jet y le agarró el brazo.

—¿Estás bien? —preguntó Steve.

—Sí —dijo Freya—. Sólo... tengo algunas cosas que necesito resolver. Te prometo que volveré pronto. Asegúrate de que Clint no muera antes de que regrese.

—Lo intentaré —dijo Steve besando a Freya brevemente—. Ten cuidado, y si me necesitas, llámame.

Freya asintió, mirando a Steve alejarse con Hill, discutiendo sobre los Mejorado. Eran gemelos, Wanda y Pietro, huérfanos a los 10 años y habían experimentado personalmente la obra de Strucker. Una vez que los dos estuvieron fuera de la vista, Freya caminó hasta el borde de la plataforma de aterrizaje y saltó sobre el mismo, dirigiéndose al edificio de la OTAN donde estaban reteniendo a Strucker.

Una vez que aterrizó afuera, se dirigió adentro y le sonrió al guardia de seguridad. Después de tantos años trabajando para S.H.I.E.L.D, y llevando una insignia solo para esta ocasión, Freya entró con facilidad, aunque cuando pidió ver a Baron Strucker los guardias dudaron.

—Puedo manejarlo —prometió Freya y, aunque todavía estaban ansiosos, la dejaron entrar a una habitación donde Strucker estaba esposado a la mesa.

—Ah, si no es mi preciada alumna —dijo Strucker sonriendo mientras Freya entraba—. ¿Vienes a hacer más preguntas?

—Quiero que me cuentes sobre mis padres —dijo Freya sentándose frente a él y resistiendo las ganas de golpearlo en la cara—. Quiero que me digas qué pasó realmente, y quiero que me digas por qué me metiste un chip en la cabeza.

Strucker se rió—. Tus padres fueron los mayores seguidores de HYDRA que he conocido. Toda tu familia era parte de la organización.

—¿Les pagaste para que me entregaran? —preguntó Freya—. ¿O fue soborno? ¿Chantaje?

—Te entregaron voluntariamente —dijo Strucker—. Todo lo que necesité fue decirles lo que iba a hacer, y no mucho después estuviste bajo mi cuidado.

—"Cuidado" —se burló Freya—. No te preocupaste por mí —metió la mano en su bolsillo, golpeando un frasco de vidrio con el chip que había quitado unas semanas antes—. Me metiste esto en la cabeza y casi me mata.

—Era un mecanismo de seguridad —dijo Strucker—. Para asegurarme de que no usaras tus poderes contra nosotros. Pero veo que dejo de funcionar.

—Bueno, electrocutarme ayudó con eso —respondió Freya—. ¿Y mis padres? ¿Siguen vivos?

Los ojos de Strucker se hundieron y en ellos vio un destello malicioso—. No. Están muertos.

—¿Qué quieres decir con que están muertos? —preguntó Freya—. ¿Cómo murieron? ¿Quién los mató?

—S.H.I.E.L.D, por supuesto —respondió Strucker—. Mataron a tus padres hace años, justo después de que escaparas.

—¿Por qué? —preguntó Freya.

—Porque eran malvados —respondió Strucker—. Tuvieron otro hijo. Un niño, y trataron de replicar mi trabajo en él.

—¿Tengo un hermano? —jadeó Freya.

Strucker se rió—. Tenías un hermano. Murió durante el proceso. Tus padres no consideraron las consecuencias, y puedo decir que la detonación fue bastante espectacular.

Freya cerró los ojos, respiró hondo y, cuando volvió a abrirlos, Strucker la estaba mirando—. ¿Cuál era tu intención?

—Hacerte mejor —respondió Strucker.

Freya se puso de pie—. Nadie necesita un poder como este. Gracias por las respuestas. Disfruta de la prisión.

GRAVITY | Steve Rogers ²Where stories live. Discover now