Mientras la noche caía (The Half Of It)

¡Feliz San Valentín!

Buff... en el último capítulo prometí actualizar y ha pasado más de un año y medio... ¡pero aquí estoy! La verdad es que mientras más tiempo pasaba más mal me sentía si actualizaba esta historia pero he decidido no pensar en esto y publicar este capítulo (y tal vez seguir la historia) por dos cosas. Una, he visto que a lo largo de ese tiempo ha seguido recibiendo apoyo y la gente la ha seguido leyendo y creo que al menos debería continuarla hasta darle un final. Y segundo, en twitter alguien hizo una broma del april fool's diciendo que iba a haber segundo parte de la película y al principio me la creí aunque luego quedé *emoji de cara de payaso*. Pero bueno, recordé que este fanfic lo empecé para continuar lo que la película dejó a medias, así que me senté frente a la compu, abrí el documento, escribí y aquí lo tienen...

No es algo muy largo, pero no quería que pasara más tiempo. ¡Espero que lo disfruten y que nos leamos pronto!

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Iowa estaba más lejos de Squahamish que San Francisco, por lo que para cuando estacionó su auto en el estacionamiento del edificio donde vivía, el mensaje de Aster tenía unas horas en su teléfono.

"Hemos llegado a la casa. El viaje estuvo muy bien. Llámame en cuanto llegues. Te quiero <3"

Con el plural se refería a su abuela. Aster se había mudado con ella luego de la muerte de su abuelo. Ni sus padres ni sus tíos querían mandar a la señora a un asilo, pero les preocupaba que se quedara sola. Aster se ofreció porque su trabajo en la preparatoria le permitía tener tiempo suficiente para atender a su abuela, aunque la señora siempre había sido muy independiente y hasta el momento no necesitaba algo más que la compañía de su nieta.

El teléfono comenzó a sonar... Aster no lo dejó timbrar más de dos veces antes de contestar.

-Yo también te quiero- dijo Ellie al otro lado del teléfono.

Aster sonrió, aunque su novia no podía verlo. -¿Cómo te fue en el viaje?-

-La próxima vez que vaya a Squahamish viajaré en tren- dejó escapar un suspiro al final.

-Si, viajar en carretera puede ser muy cansado- le confirmo, pues ella también había tenido que conducir, aunque habían sido menos horas.

-Mi papá me lo advirtió cuando le dije que me iría en el coche, pero no pensé que fuera tan agotador- volvió a suspirar.

-Tenías que experimentarlo en carne propia- soltó una suave carcajada.

-Ajá- asintió para acompañar el gesto. -Mientras venía en la carretera solo pensaba en que quería llegar a mi casa para acostarme en la cama-

-¿Sólo pensabas en eso?- su tono de voz tímida, esperando una única respuesta.

-Y en llamarte para poder escuchar tu voz- confesó con una sonrisa.

-Yo tuve que aguantarme mucho las ganas de llamarte para no distraerte en la carretera- aseguró.

-Otra razón más para que la próxima vez que vaya a Squahamish no me lleve el auto- dijo un poco con diversión. -Aunque tal vez la próxima vez que nos veamos sea en San Francisco-

-Eso espero porque no podría esperar hasta navidad para verte de nuevo- le aseguró.

-Ni yo, ni yo- no pudo evitar soltar un bostezo al decir esas palabras.

Bostezo que Aster notó. No era muy noche, el sol apenas se había ocultado hace unos instantes, pero después de un viaje largo entendía que Ellie estuviera cansada.

-No quisiera despedirme, pero deberías descansar. Ha sido un viaje largo y mañana hay que ir a trabajar. Yo también debería de preparar unas cosas de las clases para mañana-