Capítulo Tres

1.5K 214 13
                                    

La tarde estaba deliciosamente soleada, Loki prácticamente se había vaciado un tubo de protector solar porque su cachorro lo había convencido de que se metiera un rato a el mar, Loki traía a Lena en brazos mientras Thor jugaba con Fenrir, no pasaron desapercibidos para el pelinegro los coqueteos de  Thor, ni las sutiles formas en que el rubio tocaba su piel cuando se acercaba a él para asegurarse que su pequeña estaba cómoda, después de esos jugueteos, como Thor lo había prometido le estaba ayudando a Fenrir a mantener el equilibrio en la tabla mientras que Loki estaba sentado en la arena con la pequeña Lena jugando con conchitas que habían recogido, el mar los mojaba cada vez que alguna ola llegaba a ellos haciendo que Lena se emocionara de sobremanera cuando pasaba.

Mejor tarde no hubiesen podido planear, ambos niños se divirtieron a lo grande, Thor le hablo a Loki del malecón, le habían dicho que en la tarde noche se llenaba de puestos ambulantes ofreciendo diversos productos artesanales, así que solo regresaron al hotel a bañarse y en menos de una hora ya estaban los cuatro camino al lugar que el rubio los había invitado.

Loki insistió en que ahora él los invitaría a cenar, así que eligieron un bello restaurante a la orilla del mar, cenaron y se dirigieron hacia el malecón, Thor insistió en regalarle a Fenrir un amuleto que el vendedor les había dicho que quien lo regalaba algún día se volvería a encontrar con quien  aceptara el regalo por más separados que creyeran estar, Fenrir lo recibió gustoso, deseando poder seguir en contacto con Thor para que lo siguiera enseñando a surfear, Loki le había regalado una coqueta pulserita a Lena adornada con varios dijes de soles y estrellas, caminaron hasta el cansancio, nuevamente en la caminata Loki pudo sentir la forma en que el rubio ponía su mano en su espalda baja para guiarlo entre la multitud, así mismo la  manera en como se demoraba un poco más de lo necesario en quitarla, finalmente Fenrir había agotado hasta la última gota de energía, fue necesario que Thor lo llevara en brazos de regreso al hotel pues se  había quedado dormido en una banca donde habían parado a descansar y les fue imposible despertarlo, Loki llevaba a Lena cargada pues ella también había caído rendida después de un agetreado día.

"Gracias - agradeció el pelinegro mientras el rubio ponía a Fenrir en su cama cuando finalmente habían llegado a la habitación - créeme que para mi hubiera sido imposible traerlo de vuelta"

"No hay nada que agradecer - sonrió el rubio acomodando un mechón suelto  detrás de la oreja del pelinegro notando como se sonrojaba un poco - tu también me ayudaste con Lena, había estado muy inquieta y hoy la sentí muy relajada"

"Es una niña muy dulce - Loki le dio un pequeño beso en la frente a la pequeña antes de  entregársela a Thor - Fenrir desde bebé fue muy inquieto, me quedé con ganas de disfrutar ese lado tierno de los bebés"

"Es un excelente chico - Thor tomo entre sus brazos a Lena - y entiendo lo que dices, o por lo menos mi madre te entendería, desde que tengo memoria siempre me a dicho eso, que no la deje disfrutar porque crecí demasiado rápido"

Después de una breve charla y un montón de despedidas por parte del rubio finalmente estaba a  punto de irse a su habitación cuando tomó el valor necesario para dar el siguiente paso

"¿Tienes sueño? - preguntó el rubio todavía dudoso de que Loki aceptara su idea - podríamos ver una película aquí, los niños ya están dormidos y no creo que se levanten hasta mañana, un poco de ruido no los molestará"

"Si, suena genial - contesto el pelinegro - acomoda a Lena junto a Fen, él una vez dormido no se mueve para nada, no hay riesgo en que la vaya a aplastar"

Thor acomodó a su pequeña, le dio un beso para después  dirigirse a las puertas dobles que separaban la habitación del recibidor, Loki ya había elegido una película, era una comedia romántica muy cliché en donde la chica se resistía a los avances del chico y al final terminaban juntos, era algo ligero de mirar, sin necesidad de hacer ningún debate sobre la misma

"¿Estará todavía dando servicio el restaurante del hotel? - preguntó el rubio - hace tiempo que no como pizza y la chica de la película me la a antojado"

"Pizza y cervezas - dijo el pelinegro - como cuando estaba en la universidad"

"Ponle pausa a la película - dijo el rubio poniéndose de pie en ese instante - ahora vuelvo, no tardo"

Thor salió por la puerta olvidándose que había dejado a su hija sola con prácticamente un desconocido, Loki río por el hecho, tendría que decirle a Thor que eso no se hacía, al cabo de media hora Thor regresaba con dos pizzas individuales y un paquete de cervezas.

"Listo - dijo el rubio poniendo la comida frente a ellos- como no sabía cuál te gustaba las elegí solo de peperoni"

"Esta perfecto - dijo el pelinegro tomando la pizza y una lata de cerveza - cuando terminemos de ver la película recuerdame de hablarte de un pequeño tema que se llama responsabilidad paternal"

Thor solo se río, sabía a que se refería Loki, pero había algo en el pelinegro que lo hacía confiar en él, ambos se volvieron a sentar y continuaron viendo la película.

Se comieron la pizza y bebieron  las cervezas, Thor se había tomado cuatro y Loki solo dos, el pelinegro no era tan resistente al alcohol, normalmente lo evitaba porque era lo que decían un borracho alegre

La película avanzaba, la escena del romanticismo estaba proyectándose, Loki reía por lo tímido que se había vuelto el chico después de ser él quien andaba tras de la chica, Thor lo observaba reírse, era una risa fresca y burbujeante, Loki un poco deshinibido  se comenzó a relajar despidiendo su aroma de chocolate con menta, Thor percibió el envolvente  aroma y dejó salir el suyo, olia a bosque después de un día de lluvia, limpio, terroso, relajante, sin meditarlo mucho Loki cerró sus ojos y se lleno sus pulmones con el delicioso aroma, no supo en qué momento Thor había invadido su espacio personal pero lo siguente que registro sus sentidos fueron las puntas de los dedos del rubio tocando delicadamente la piel de sus brazos, un escalofrío electrizante recorrió su columna que fue derramándose por todo su cuerpo, volvió su rostro a donde estaba el rubio, sin pensarlo poso su mano en la fuerte mandíbula acariciando con sus largos dedos el rostro varonil, Thor no perdió tiempo y antes de que Loki supiera que es lo que estaba haciendo el rubio estaba saqueando sus labios en un apasionado beso.

Sin buscarloحيث تعيش القصص. اكتشف الآن