VII

16 1 0
                                    

Mis amigos me miraban preocupados, tanto rencor en un corazón es dañino. Pero, aún dolía, dolía cómo la mierda.

"YoonGi, mmm... Mi madre está organizando un viaje para meditar en unas grutas, me pidió llevarte, es solo un fin de semana, de hecho, es este próximo fin, vayamos ¿sí?" SeokJin me hablo con ese tono sereno que le caracterizaba, intentando de ese modo calmarme

"No necesito meditar, ¡SE LO QUE QUIERO HACER, MALDITA SEA! " grite ya no siendo dueño de la razón

"Deberías ir con Jin y su madre Yoon, es más, vamos los tres, no lo hagas por Jimin, hazlo para que consigamos un poco de inspiración, anda. Será como la convención de Japón" mi moreno amigo hablo con el mismo tono que utilizo Jin, mis amigos estaban ahí, apoyándome aun con toda mi mierda.

Los mire por un par de segundos y luego acepte la invitación de ambos, necesitaba despejarme un poco y Namjoon tenía razón, necesitaba inspiración para la producción del álbum de un nuevo grupo

"Iré, pero hoy quiero que me acompañen a divertirme, quiero dejar de pensar en sus estúpidos mensajes" me levante del suelo y cogí las llaves de mi casa y auto junto con una chaqueta, les pedí que saliéramos y ellos aceptaron, fuimos a un antro-bar, la música y el al alcohol no es que fueran los mejores amigos en esta situación, pero, no quería estar acompañado de la soledad de mi habitación.

Bebimos, cantamos, bailamos y reímos, justo lo que necesitaba.

Y entre la multitud, conocí a un chico, precioso, sin duda, se acercó a mí y comenzamos a bailar, al cabo de un par de tragos más sin pudor alguno comenzó a bailarme, restregaba su trasero a mi entrepierna, subiendo y bajando, luego se colocaba de frente a mí y bajaba lentamente su cuerpo, tocando el mío sin vergüenza y cuando la erección fue notable, se acercó a mí oído y susurro con voz seductora y lasciva "vamos al baño, aquí hay mucha gente y no puedo hacerte lo que mi mente piensa" acepte sin dudar, el tomo mi mano y caminamos entre la multitud hasta las oficinas del bar, me extrañe "estos no son los baños" exclame aún confundido, el chico solo soltó una risilla y sin más estampó sus labios a los míos haciendo que mi espalda chocase con la superficie rígida, en tanto el chico puso seguro a la puerta, mis manos traviesas trazando su bien formada figura, lo aparte un poco "nos meteremos en problemas por estar aquí, vamos a otro sitio" el soltó una risita y luego camino hacia atrás hasta el escritorio, mientras desabotonaba su camisa para aventarla lejos, sin dejar de reír y coquetearme con la mirada llevó sus manos al cinturón y de un jalón lo saco de su fina cintura, al topar con el mueble sin más pego su pecho a la superficie plana "nadie entra aquí a menos que yo lo diga, es mi puto bar y tu... Esta noche vas a follarme tan duro como si no hubiera un mañana. Porque, te deseo desde que entraste por esa puerta" negué y me acerque a él con una sonrisa ladina en el rostro, no hizo falta preguntarle su nombre, al día siguiente probablemente no me acordaría de cualquier forma.

Las respiraciones agitadas de ambos algunas prendas en el suelo y nuestros cuerpos saciados de placer. No había más que hacer, tomé mi ropa y me la coloque como si nada hubiera pasado, peine un poco mi cabello y antes de salir de aquella oficina para encontrarme con mis amigos el susurro aún agitado "Eres un maldito adonis, podrías pedirme lo que quieras y te lo daría, tú y tus amigos pueden pedir lo que quieran, la casa invita y tu..." callo un momento su agitada voz antes de sentir su pecho pegándose a mi espalda, y sus labios cerca de mi oído para susurrar "Tu. Cariño, puedes venir aquí cuando quieras, las puertas de mi oficina siempre estarán abiertas para ti, al igual que mis piernas" musito sensual y ronco antes de morder el lóbulo de mi oreja y una sonrisa de lado se instauró en mi rostro "Me parece una buena oferta" salí de ahí dejando al chico sin importarme nada más.

Al salir recargue mi espalda en la pared, tratando de controlar mi respiración, el chico me hizo revivir algo que creía perdido. no, no me mal entiendas, no me enamore de ese desconocido, pero, me hizo sentir deseado, como hace mucho no lo hacía, sus manos sobre mi piel me demostraron que yo no era un obsesivo del sexo como mi ex pareja me hizo sentir, sus labios besando mi piel, demostraron que mi cuerpo vibra y siente con el placer y que no tengo porque reprimirme, sus cuerdas vocales deshaciéndose en gemidos haciéndome ver que el placer carnal no está mal, su boca en mi intimidad arrancándome gruñidos roncos me hicieron recobrar mi autoestima al mostrar mi cuerpo desnudo. Y sus palabras al final, solo me hicieron darme cuenta que puedo ser deseado, que soy bello, que no doy asco ni soy menos que nadie. Debo agradecerle al desconocido, debo agradecer por abrirme los ojos al mundo en el que ya vivo.

¿Jimin? Ni siquiera pensé en él, después de un año había follado por primera vez, si, desde que nos dejamos no había estado con nadie y el hacerlo esta vez, me devolvió un poco la chispa. Dejé la aprensión que mi cuerpo sentía por el suyo, ya no sentía que debía ser su cuerpo junto al mío, ya no.

Aún tengo un poco de dudas de lo que hay después de ti.

Aún me lo pregunto

¿Qué hay después de ti?





Continuará...
Yue 🌙

DESPUES DE TI.Where stories live. Discover now