Registro de Isekai

Capitulo 1

Capítulo 1: Declaración

"¡Oh hombre, oh hombre, oh hombre...!"

La peliazul corrió frenéticamente por los pasillos, jadeando pesadamente ante el inusual esfuerzo que hacía por acelerar el paso. Como si la persiguiera un monstruo, que era más probable de lo que parecía en su vida, se movió como si su existencia dependiera de ello. Luego, después de tomar una esquina, sus ojos se iluminaron. ¡La puerta! Con una risita, lo atravesó, las bisagras casi se rompen por la fuerza y ​​abrió los brazos con felicidad. Justo a tiempo, pensó con una amplia sonrisa.

"¡ESTOY AQUÍ!"

El silencio era ensordecedor. El salón, no, el espacio en el que entró era enorme, bien podría haber sido su propio país. Desafiando el sentido común, era como un círculo infinito alrededor de una plataforma singular en medio de este lugar. Cada individuo sentado en su propio lugar especialmente diseñado, con espacio más que suficiente entre ellos, se volvió hacia ella de inmediato. Diversión. Juicio. Asco. Todo tipo de expresiones fueron dirigidas al pobre individuo que definitivamente no llegó a tiempo. Ah, estaba a punto de llorar por las miradas que estaba recibiendo. No era como si pudiera castigarlos por hacerlo de todos modos. Si un mortal normal hubiera entrado en este lugar, moriría en el acto solo por la mera atmósfera, llena de su aura.

"Uhm, Aqua, ya comenzamos", una persona de cabello blanco con un vestido de monja levantó la mano, sonriendo cortésmente mientras señalaba a su lado. "Por favor siéntate."

¡Maldita sea Eris! ¡Ella solo lo empeoró al señalarlo! ¡Si no fuera por ella, al menos podría haber fingido que nada estaba mal, con toda la dignidad y el orgullo de una diosa que tenía! Con una mirada silenciosa, haciendo que su compañera diosa retrocediera, se dejó caer en su pequeño trono, tratando de hacerse lo más pequeña posible. Bueno, en el lado positivo, había tantos otros dioses aquí, ¡estaba segura de que nadie la recordaría!... ¿Verdad?

Dada la mirada desdeñosa que recibió del hombre en el medio, su esperanza comenzó a desvanecerse. Sacudiendo la cabeza con un profundo suspiro, su puntiagudo cabello negro fluyó por el aire con un aura majestuosa, cada movimiento hecho deliberadamente en perfecto control. Extendiendo sus brazos vestidos de oscuro, puso una sonrisa mientras respiraba profundamente, su cuerpo de guerrero mostrando su valía a la audiencia.

“¡Como estaba diciendo, compañeros dioses! ¡Ha llegado el momento en que los mundos deben separarse! ¡Hemos dejado que los mortales actúen sin control durante demasiado tiempo! ¡Dije que suficiente es suficiente! ¡No podemos simplemente dejar que los seres inferiores se ocupen de los problemas que nosotros mismos podríamos resolver! Si los mortales nativos no pueden manejar sus problemas, ¿cómo podrían hacerlo los mortales extranjeros? Curvó su mano en un puño, sosteniéndolo frente a su cara con determinación. "¡Es hora de que tomemos las riendas en nuestras manos como siempre debemos, como seres divinos!"

Aqua siguió la corriente cuando comenzaron los aplausos, lo que provocó que chasqueara la lengua con molestia. ¡Hubiera estado bien un pequeño resumen! ¡Pero no, no hay piedad para la pobre diosa que acaba de llegar tarde! Bueno, no podría ser demasiado importante de todos modos. Ni siquiera Eris parecía demasiado emocionada por esto, aplaudiendo solo porque era una persona educada. Aquí y había algunas personas más interesadas en esto, pero no Aqua, no señor. ¡No podía creer que se apresuró todo el camino para venir aquí en lugar de finalmente beber el vino que logró esconder!

El hombre dio paso a otro, esta vez un cascanueces real. La diosa no pudo evitar reprimir una risita. Claro, los dioses como ellos eran excéntricos y podían elegir la forma que quisieran, ¡pero esta tenía que ser una de las más estúpidas! ¡Ja, incluso ella podría pensar en una mejor forma si así lo quisiera!