🫧 Historias eróticas con diferentes Girls Idols, diferentes escenarios🫧
¡No leer si eres menor de edad porque la historia trae lenguaje obsceno!
🫧
No escribo historias con Idols menores de edad, así que favor de no pedir historias de ellas.
A...
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-No se olviden de no abrirle a nadie.
-Lisa, Ji Hyun, no han nada malo.
El esposo de mi madre nos dice mientras salen de la casa directo a una cena de trabajo.
-No te preocupes, papá. Ya vete se hará tarde.
Lisa saca a su padre de la casa y yo suelto una risa, viendo la escena divertida.
-Si no lo saco no se va. Iré a mi habitación, si necesitas algo ve.
Yo muevo la cabeza en señal de sí, veo a la rubio subir por las escaleras y yo decido irme a bañar para poder acostarme en la cama.
Subo a mi habitación sacando ropa y salgo al baño que compartía con mi hermanastra.
No prendo la luz ya que me gustaba bañarme, aunque ya haya tenido algunos accidentes.
Estaba en medio de mi baño hasta que se prende la luz, me quedo quieta y escucho a Lisa tarareando una canción.
Me da vergüenza salir y me quedo en silencio en la ducha, ella parece quitarse su ropa, hasta que la cortina se corre.
Ella me mira y yo con vergüenza me tapo.
-¡Perdón!, no sabía que estabas bañando.
Ella sale de la ducha apenada.
-Ve el lado bueno, reforzando los lazos.
Intento hacerme la graciosa mientras rápido me quito el jabón del cuerpo.
-Espero aquí hasta que salgas.
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A los pocos minutos salgo y veo a la chica envuelta en una toalla sentada en el lavabo, yo intento no pensar más allá y me apuro a buscar mi toalla.
-¿Era tuya?, pensé que la había dejado aquí.
Vuelvo a verla y efectivamente, ella estaba envuelta en mi toalla.
-No puedo salir desnuda por el pasillo, será mejor que me la des.
Mientras hablaba secaba con un trapo el agua que estaba escurriendo de mi cuerpo, no me había dado cuenta que mi trasero lo había dejado frente a la chica.
-Lo haces para provocarme, no?
-¿De qué hablas?
-Dejar tu trasero a la vista.
-No me había dado cuenta, no fue apropósito.
Ella se levanta quitándose la toalla, dejaba descubierto su cuerpo, mi vista no se despegaba de el.
-Que tristeza, me hubiera gustado que fuera intencional.
Se posa detrás de mí, sus labios quedaban a la altura de mi cabello mojado, ella se apega más dejándola húmeda.
-Quiero follarte ahora mismo.
-¿Qué?, esto no está bien, solo hermanastras.
-A la mierda, eso no pensabas mientras te masturbabas viéndome en las fotos con bikini.
Me avergüenzo, no sabía que ella me había visto, tenía que haber cerrado con seguro la puerta de mi habitación.
-Y sabes que, yo también me masturbaba mientras veía tu hermoso coñito lleno de fluidos.
Ella pone su mano sobre mí cuerpo bajandola lentamente hacia mi coño.
-Lisa.
Mi voz sale nerviosa, nos volteamos y yo quedo sobre el lavamanos, nos veíamos en el espejo.
-Sé que quieres, y quiero que veas tu rostro mientras te follo.
Ella empieza a mover mi clítoris con sus dedos, mis gemidos empezaban a salir, pero solo me veía a mi.
-Mierda, sigue carajo.
Susurro y ella sonríe.
-No que no, perrita?
Se agacha y siento su lengua recorrer todo mi coño, suelto un gemido más alto, cerrando mis ojos por el placer.
-Ven, vamos a la ducha.
Ella toma mi mano y de nuevo entramos a la ducha, ella abre la llave posicionándose bajo el agua, agarra mi cintura para apegarme a su cuerpo.
Sus labios se pegan a los míos besándonos, el agua recorría nuestros cuerpos.
Bajo mis manos hacia su coño tocandolo, ella suelta unos jadeos durante el beso.
Me separó y me agacho, quedando a la altura de su coño. Alzo una pierna poniendola sobre mi hombro.
Lamo su coño gustosa saboreando sus fluidos, ella gemia apoyándose sobre la pared.
Meto mi lengua y la saco, así penetrandola, su clítoris se encontraba duro por el placer.
-Eres tan deliciosa.
-Sigue, hermanita.
Empiezo a besar los labios de su coño, la otra mano sube a su trasero y meto un dedo.
-Más rápido.
Muevo mi dedo más rápido y aprovecho a meter otro, el baño estaba lleno de sus gemidos.
Ella tomó mi cabeza pegándola más a su coño, yo lo lamia como si fuera mi platillo favorito.
Me separó y me pongo de pie, la volteo dejando sus pechos sobre la fría pared.
Meto los dos dedos a su trasero y la tomó a ella de su cuello, sin afixiarla.
Ella gemia y su cuerpo estaba pegado al mío, besaba sus hombros dejando marcas en ellos.
-Me voy a correr, sigue.
Ella suelta entre gemidos, mis dedos salen y entran más rápido, hasta que su piernas empiezan a temblar.
Su orgasmo había llegado, mientras sus fluidos salían nuestros labios de nuevo se encuentran, nuestras lenguas jugaban entre ellas.
-¿Niñas?
Escuchamos que alguien toco la puerta, nos habían escuchado....
