🫧 Historias eróticas con diferentes Girls Idols, diferentes escenarios🫧
¡No leer si eres menor de edad porque la historia trae lenguaje obsceno!
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No escribo historias con Idols menores de edad, así que favor de no pedir historias de ellas.
A...
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Compañeras de habitación
-Este es tu cuarto, tu compañera ye llegó.
La chica se va y me deja frente a lo que seria mi nuevo hogar, por lo que me había dicho son habitaciones compartidas, ya que son muchos y estudiantes y compartir habitación era lo más recomendable.
Meto las llaves y abro la puerta la habitación se encontraba en silencio y en una cama se estaban unas maletas, quizá mi compañera de habitación salió porque no se oía ningún ruido.
Comencé a explorar y ver dónde podría colocar mis cosas, el baño fue el último lugar y sin rodeos abro la puerta, pero alguien estaba ahí.
Una chica de cabello largo y delgada se encontraba saliendo de la ducha, su cuerpo se encontraba mojado, sus pechos se veían brillantes por el agua.
-¡Lo siento, lo siento! -Salgo corriendo del baño cerrando la puerta, la chica ni siquiera dijo nada.
Me siento en la cama nerviosa, no sabía si salir, no conocía nada.
Al poco tiempo la chica sale del baño con un pantalón largo y aguado con un top de manga larga, algo cómodo.
-Una disculpa de verdad, pensé que no se encontraba nadie.
-Deja de disculparte, no tiene nada de malo tenemos lo mismo.
Y era verdad, pero me daba mucha pena ver un cuerpo ajeno, y más si es una chica y desnuda, la mente de su cuerpo no salía de cabeza me imaginaba besando sus pechos.
-¿Te sientes bien?
La pregunta rompe mi pensamiento y me doy cuenta que me he sonrojado, la chica me miraba parada frente a mi, asiento con la cabeza y me levanto para tomar ropa e irme a bañar.
-Oye, no me he presentado, soy Seulgi.
La chica habla de nuevo y volteo a mirarla ella alza su mano esperando a que la tome.
Tomó su mano y miró directamente a sus ojos.
-Soy Ji Hyun, un gusto Seulgi.
Sostenemos la mirada y las manos siguen juntas, no nos encontrábamos ni tan lejos ni tan cerca, pero desde aquí podía ver perfectamente su rostro y de verdad no tenía ninguna imperfección.
Sus labios se encontraban entre abiertos y mi curiosidad por tocarlos era muy grande, vuelvo a mirar sus ojos y veo que su mirada se encuentra también en mis labios.
-Creo que es mejor que me bañe, si tardo hará más frío.
Rompo nuestras manos juntas y camino hacia el baño para bañarme.
