Especial de San Valentín

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Carraspeé. 

—¿Dejarás de follártelo si te digo que no puedes hacerlo?

Se mordió el labio y sus ojos brillaron con picardía. 

—Claro que no, eso sería un desperdicio. Tu hermano folla como los dio...

Hice una mueca y coloqué una mano al frente para que se callara. 

—No quiero saber los detalles, guárdatelos. Quiero conservar mi comida en mi estómago por más de una hora. 

Rio. 

—Siempre tan dramática—se quejó y colocó su cabello rubio tras su hombro.— Bueno, no puedo contarte sobre Damen pero sí sobre Jakov. 

—¿Quién?

—El otro tipo con el que estoy...socializando. 

Enarqué una ceja, suspicaz. 

—¿Socializando con qué? ¿Su polla?

—Por supuesto—dijo segura—. Aunque creo que está perdiendo los papeles.

—¿Por qué?

—Hoy me llevó flores y chocolates a la oficina. 

Abrí la boca impresionada. 

—¿Te llevó... flores a la oficina?

—¡Sí!—dijo emocionada— Me pareció un poco intenso de su parte considerando que solo nos hemos visto tres veces para follar, pero debo admitir que fue dulce, ¿quién diría que sería tan romántico?

—Aparentemente tú no—acoté percibiendo la pequeña llama que llevaba encendida desde la mañana atizándose con sus comentarios y ganando terreno. Clavé mi vista en la carta.— ¿Ordenaremos ya o seguirás fantaseando con Jakov?

—Wow, calma tu malhumor, Morgana—¿Por qué me hablas con ese tono? Pareciera que quisieras morderme. 

Puse los ojos en blanco, hastiada. 

—Nada, es solo que tengo un montón de papeleo sin atender por estar aquí contigo y lo último que quiero es que me restriegues lo romántico y perfecto que es otro tipo. 

—Es el día de San Valentín, Leah—lanzó un quejido y luego hizo una mueca fijando su atención en la carta.— Por el bien de Alex espero que te dé flores o de lo contrario te lo comerás vivo. 

Gruñí, la molestia y frustración creciendo en mí. 

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—Gracias por su tiempo señor Odgen, la institución está más que dispuesta a cooperar con su causa—sonreí al hombre de mediana edad frente a mí. 

—Me encanta hacer negocios con usted, señora Colbourn—sonrió—. Con una esposa tan brillante como usted, su esposo debe esforzarse mucho para estar a su nivel y mantenerla contenta. 

Fue mi turno de sonreír, aunque una pequeña molestia me apretó el estómago. 

—Créame, lo logra sin problema.

—Excelente, los hombres así estamos muy viejos o ya hemos muerto—soltó una risita socarrona.— Bueno, creo que es mejor que me vaya. Debo recoger flores antes de ir a casa, a mi esposa le encantan y este es el día en que más las aprecia. 

Reprimí el impulso de poner los ojos en blanco. Estúpidas flores. Son solo flores. Ni siquiera me gustan las flores. No me gustan, ¿o si?

Irresistible Error. [+18] ✔(PRÓXIMAMENTE EN FÍSICO)حيث تعيش القصص. اكتشف الآن