▪ Idea Principal:
El es y será el mejor héroe, aunque está vez no tuviera esa capa roja, aún así, la determinación en sus ojos seguía ahí.
Fanfic | Homosexual/Oc.
Desvío de la trama Original.
Actualizaciones cada que pueda.
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Colapso.
Una risa se escuchó detrás de su espalda, con sorpresa Manjiro volteo a verlo, era él, su Emperador.
—¿Por qué esa expresión Mikey? —.
Su vista estaba fija en aquel tronco, la textura del mismo la sentía atreves de sus dedos, su mano posada en aquel gran roble, donde el estuvo para su inevitable encuentro con esas dos personas, desde entonces, por ambas partes no se han separado.
Desde hace un rato tenía un mal augurio, en su mente llegó el lugar en el que estaba, sin dudarlo se presentó ahí.
—Bushida —un escalofrío corrio por su espalda, la voz de Mikey resonó, había dicho su apellido.
Titubeó, pero aún así su cuerpo se movió para mirarlo, violeta y obsidiana chocaron. Tenía miedo, después de tanto, era la primera vez que experimentaba el pánico irracional.
—Esta fuera de ToMan —declaro.
No fue capaz de refutar sus palabras, si es lo que el quería. —Que así sea —responde.
El rubio aprieta sus puños con irá. —¿Que clase de maldita respuesta es esa? ¿Realmente nunca te importo? —.
—¿Y tú? Sigues viendo cosas de las cuales realmente no son —demando.
—¿No son? —sonrie sin gracia. —¿Entonces tus mentiras solo son estipulaciones mías? —.
Una exhalación salió de sus labios, trataba de tranquilizarse. —Tu en verdad. Prefieres ser fiel a lo que crees ¿No es así? —duda.
Los dientes de Mikey chocan entre sí, el no tenía la culpa, era Fudochin que quería abandonarlo, sin notar que lo está alejando.
Un fuerte agarré dió a parar en Manjiro, la expresión de Draken buscando respuestas era clara, pues vio cómo el Emperador se iba con una amarga expresión. El cenizo alzo la mirada hacia el árbol, él ya no se encontraba ahí.
Da igual, estaban mejor sin él.
—No debiste de acabar así, fue mi culpa —. Quería llorar, si ese día no le hubiera abandonado cual escoria, tal vez su situación sería distinta.
—¿Ahora te arrepientes? ¿Debería llorar por tu abandono? ¿O porque inevitablemente eres el culpable de todo lo que pasó con ToMan? —sonrie inocente.
Sano se mordió la lengua, si tan solo se hubiera disculpado antes. —Yo- —la expresión de Bushida cambio a una más tranquila, imaginando lo que diría.
—¿Quieres mi perdón? Es solo eso ¿No? Entonces, te perdono Manjiro —.
El mencionado trago, la bilis se acumuló, quería vomitar, sus expresión de calma, no era sincera.
