Bernarda es una chica que perdió a toda su familia muy joven por ende le transfirieron a un orfanato hay la vida no a sido fácil desde que llegó sus problemas con las drogas, sus ataques de ansiedad, los abusos que ha recibido a lo largo de su vida...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
PARTE IV
𝑵𝑰𝑪𝑶𝑳𝑨𝑺
Dos días después
La miro fijamente esperando que coma, pero no la hace
Suspiro
-Tienes que comer – le suplico, ya no sé qué hacer para que se alimente
-No tengo hambre – se acurruca más en la almohada
-Princesa si no comes te puede dar anemia y todo que hemos logrado se va a ir a la basura – se encoge de hombros
-No me importa – inhalo tratando de no explotar contra ella
Dios dame paciencia
-Ya me harté – me mira finalmente – Tu no fuiste la única que perdió un hijo – se queda en silencio –Yo también lo perdí y no estoy tirado en una cama lamentándome y hundiéndome, sé que te duele como a mí, pero estoy harto que cada vez que algo malo pasa tú te sumes en una miseria ¿Acaso crees que a mí no me duele que estés así?
-No lo se
-Claro que me duele – ríe - ¿Que te da tanta gracia?
-No entiendo porque armas tanto drama si tú has de estar feliz de que perdí a nuestro hijo, al fin y al cabo, ya no tienes que hacerte cargo
¿Ella dijo eso? ¿Mi Berny dijo eso?
- ¿Qué carajo dices? – le miro incrédulo y dolido - ¿Cómo te atreves a decir eso? ¿Te estas escuchando?
Golpeo la mesa ocasionando que la comida se caiga al suelo
- ¡TU ESTAS TAN SUMIDA EN TU PUTO DOLOR QUE NO PIENSAS EN LOS DEMAS! ¡TU ERES UNA MALDITA EGOISTA! ¡SOLO PIENSAS EN TI! – le grito tan fuerte que ocasiono que abrace la almohada del susto
- ¡PUES SI SOY UNA EGOISTA LARGARTE! - me grita - ¡NADA TE ATA A MI, AHÍ ESTA LA PUERTA PUEDES LARGARTE!
Yo no me quiero largar, yo quiero ayudarle
- ¡YO LO UNICO QUE QUIERO ES AYUDARTE BERNARDA! ¡¿NO TE DAS CUENTA QUE YO TAMBIEN SUFRO?! ¡SUFRO POR LOS DOS! ¡POR QUE SE QUE SI SEGUIMOS ASI LO NUESTRO VA A TERMINAR PRONTO! – los chicos abren la puerta preocupados por nuestros gritos
- ¡Nicolás tranquilízate! - Ross me agarra del brazo tratando de que me tranquilice
Debo tranquilizarme, si no voy a cometer una estupidez que luego me voy arrepentir
La miro y se encuentra llorando desconsoladamente en el hombro de Peter
No quise reaccionar así, pero estoy preocupado por ella, ella es mi vida