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63. CITA A CIEGAS PARTE 01 《SKYJADE》

Está bien, sacare lo mejor de esto. Pero que sea la última vez que me hace una cita a ciegas -dijo Luke advirtiendo a su hermana.

Bien -dijo ella dando un suspiro- Solo quiero que seas feliz como yo, Luke

Lo sé -asintió y se puso de pie. Ella también se puso de pie y lo abrazo con fuerza.

Bien -sonrió Leia- Te quiero, hermanito

También te quiero, hermanita -dijo él, saliendo para ir a su cuarto.

Luke abrazó su chaqueta un poco más a su alrededor mientras la temperatura bajaba un poco más en la tarde de otoño, había llegado cinco minutos antes a la cita, pero pensó que sería seguro y caballeroso. Leia no le había dicho exactamente como su cita lo reconocería ya que ciertamente no había visto un holograma de ella.

Miro hacia la acera y alrededor de la multitud de viajeros. Leia tampoco había mencionado si era humana o no...

Ese pensamiento lo envió un poco fuera de sí. Aunque no era de los que juzgaban a una persona por su especie a menos que fueran Bothan, no imaginó exactamente un futuro. Antes que pudiera ver su crono, alguien se detuvo a su lado y él levanto la vista, las facciones familiares de la mujer le dibujaron una sonrisa en el rostro de inmediato.

Mara -sonrió- ¿Qué estás haciendo aquí?

En este momento me pregunto qué estás haciendo aquí, Skywalker -sonrió la pelirroja, apoyándose contra la pared a su lado- No tienes frio

Un poco -se encogió de los hombros- Aunque crecí aquí. ¿Demasiado frío para ti?

Un poco -respondió fácilmente Mara, llevaba un vestido negro que llegaba justo por encima de las rodillas, con tacones lo que hacía casi de la altura de Luke tenía el pelo suelto, algo apenas veía fuera de las ocasiones formales, y se tomó un segundo para admirar su pelo y la forma en que reflejaba la luz de los carteles cercanos.

¿Entonces que estás haciendo aquí? -pregunto de nuevo Luke, moviéndose para estar más cerca de ella.

¿Prometes no reírte? -pregunto Mara dudosa.

Lo prometo -aseguró, mostrando una sonrisa genuina.

Karrde me arreglo una cita -dijo, mirando hacia el otro lado con inquietud y Luke se río.

¿Alguien que yo conozca? -pregunto Luke.

Lo dudo -contesto ella haciendo una mueca- Ni siquiera quería venir, pero él insistió. Karrde invento un perfil y todo eso

Créeme, lo siento por ti -dijo poniendo los ojos en blanco- Leia hizo exactamente lo mismo conmigo. No creía que realmente lo haría, pero aparentemente cree que todavía estoy obsesionado con Callista

Oh, por favor. Cualquiera puede ver que finalmente lo has procesado todo -dijo Mara.

¡Gracias! -dijo él suspirando- ¡Estoy tan cansado de que la gente de su simpatía!

Entonces, ¿Quién es la afortunada? ¿Alguien que yo conozca? -bromeó Mara y Luke se río entre dientes.

No tengo idea -dijo- Ale o Alicia algo

¿Arica? -preguntó Mara, con su ceja arqueada y una sonrisa jugando en su rostro.

¡Si! ¿Leia la llamo así? -dijo él asistiendo.

¿Eres Starkiller? -ella sonrió. El reconocimiento se iluminó en su rostro mientras juntaba los hechos.

Oh, por la fuerza, ¿Eres mi cita? -afirmo Luke sorprendido.

Creo que lo soy, Skywalker -se río entre dientes- Podría ser peor. Podría ser una mujer loca

Luke se río de la broma, recordando todos esos años atrás cuando conoció a Mara en el templo proclamando que era su rival.

¿Debemos? -pregunto Luke, señalando hacia el restaurante.

Si -dijo, riendo entre dientes, pero lo siguió al interior del edificio.

Estaban sentados en una pequeña mesa en la parte de atrás, agradeciendo de estar lejos de las miradas indiscretas. Lo último que Luke quería que alguien lo reconociera y cubriera la cara de Mara con la suya en toda la HoloNet News a la mañana siguiente. Dejaron sus abrigos en el respaldo de sus sillas y Luke se quedó mudo un momento cuando vio el vestido de Mara. Ni un solo centímetro del vestido le desagradaba a Mara, y el tono oscuro iluminaba bien su piel pálida y su cabello ardiente.

Te ves hermosa -comentó Luke y ella levantó la vista, un poco incomoda con el comentario.

Tu tampoco te ves tan mal -dijo sonriendo- Es bueno ver que tienes algo que no sea negro

Leia me hizo prometer que usuaria algo diferente -admitió sintiéndose culpable.

Bueno, al menos alguien cuida tu guardarropa -dijo Mara bromeando con Luke.

Luke negó con la cabeza y tomo el menú, aunque venia aquí con tanta frecuencia con Han, Leia y sus padres ya había probado casi todo, el camarero pasó y cada uno dio sus órdenes y Luke pidió un poco de vino para ellos, encogiéndose fácilmente de los hombros cuando Mara levanto una ceja con curiosidad. El mesero se fue y quedaron a solas una vez más. Ambos platicaban de que había sido de ellos después de no verse en tanto tiempo hasta que el mesero regreso con su orden y descorcho el vino, sirviendo una copa a cada uno mientras se sentaban el silencio y esperando que se fuera. Dejo la botella en el borde de la mesa y se fue, permitiéndoles reanudar su conversación.

La cena transcurrió entre chiste, momentos incomodos y sonrojos. Salieron del restaurante Mara se despedía, y Luke decidió invitarla un café y ese café paso a ir a una caminata por la plaza de Theed algo sencillo, pero ambos lo disfrutaban. Se hizo media noche y ahora si debía despedirse Mara.

Mara, me divertí mucho -dijo Luke con una sonrisa.

Lo mismo digo. Aunque no esperaba que mi cita fueras tu aun así me divertí -comentó Mara con una sonrisa- Tengamos otra cita Luke

Claro, podemos ir a ver una película -comento Luke sonrojado.

Que atrevido es usted caballero jedi -dijo ella riendo levemente.

Mi lady sería un placer ser tu caballero si eso deseas -comento Luke dando una reverencia a Mara.

Ambos rieron escandalosamente, Mara fue hasta su nave, él debía ir hasta donde dejo su deslizador. Tenía tanto tiempo sin verse ahora ninguno quería decir adiós de nuevo. Aunque Mara siempre tenía hacer una mujer independiente así que le dio un beso en la mejilla a Luke.

Nos vemos, en nuestra segunda cita -dijo Mara subiendo su nave.

Mara despejo su nave y Luke veía como ella se alejaba. Luke toco su mejilla donde Mara lo beso y con una sonrisa se fue hasta su deslizador para irse a su casa, ya que esperaba con ansias su próxima cita.