Capítulo 30

14 9 27
                                    

Narrador Omnisciente

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Narrador Omnisciente

Las vacaciones de invierno llegaron y los personajes de esta historia se preparan para realizar un viaje todos juntos a la montaña. Alaia es partidaria a pasar los días fríos en casa tomando chocolate caliente, pero aun así la insistencia de sus amigos dio fruto y decidió ir, sumándose sus padres y hermano a la aventura.

—Mamá dice que no olvides echar tus guantes —le dice Santi a su hermana desde la puerta de la habitación de la misma.

—Dile a mamá que recuerde que odio pasar frío, que está más que claro que no olvidaré nada —el pequeño asiente y corre a donde se encuentra su nueva mamá transmitiéndole el mensaje.

El pequeño Santiago por fin tiene una familia, una que lo ama de verdad. Le encanta jugar béisbol con su nuevo papi y comer las delicias que les prepara su nueva mami; pero lo que más adora es que su hermana le lea cuentos antes de dormir. Estos dos han hecho una enorme conexión, como si se conocieran desde hacía años; sus padres no pueden estar más que orgullosos.

(...)

El sonido de un mensaje entrante hace que Leyla deje de acomodar su maleta. Toma en sus manos el celular y ve el mensaje que la acaba de llegar:

Desconocido: El invierno llegó y no siento frío, no siento nada. Mi alma es más fría que el invierno y por eso parece que estoy en verano. Cuidado en la montaña, no sabes quién puede andar por sus alrededores.

Leyla rueda los ojos cuando termina de leer y sigue en lo suyo, hasta que llega su abuela y debe parar de nuevo:

—Aquí están las galletas que le prometí a Alaia, recuérdale que debe compartir y no comérselas todas. Después se anda quejando de que le duele el estómago —las dos ríen y Leyla toma la caja que le entrega su abuela y la guarda.

(...)

Por otro lado se encuentra Yannick, batallando con la euforia de su pequeña hermana. Está ansiosa por montar trineo y hacer ángeles de nieve. También quiere ver a su nuevo amigo, Santi. Quien por suerte está aprendiendo lenguaje de señas con Alaia.

Yann ignora a su hermana por un momento, perdiéndose en su mundo. Tal vez antes el frío le daba igual, pero ahora no; ahora el que tenga frío es la excusa perfecta para abrazar a Alaia sin que ella lo repele. Su novia no es fan a los abrazos todo el tiempo, y eso a él lo decepciona; pues es un osito cariñoso que necesita ser apapachado continuamente.

Una movida enérgica en su antebrazo lo hace volver a la realidad, su hermana mueve sus brazos y el chico no entiende nada de lo que quiere decir.

Una sola palabra: INCOMPRENDIDA   [Completa✓] #1 Where stories live. Discover now