𝐃𝐞𝐦𝐚𝐬𝐢𝐚𝐝𝐨 𝐂𝐞𝐫𝐜𝐚 [TaeJin]

Capítulo 6

A las diez de la mañana el médico le dio el alta a Taehyung junto con una larga lista de indicaciones. Jin escuchó atentamente con la seguridad de que podía ocuparse de todo lo que hubiera que hacer.

HyeJin y Sandara, junto con sus esposos, ya se habían marchado. Habían estado en el hospital por la mañana temprano, pero, como SeokJin ya sabía que eran la familia de Taehyung, disfrutó de la atención que las dos mujeres le profesaban. Desgraciadamente, Jungkook también se había presentado al amanecer.

SeokJin estaba dormido cuando llegó y se despertó para encontrarse con su enojado rostro. Parecía molestarle que Jin se hubiera quedado a pasar la noche en el hospital, como si fuera a molestarlo. ¡Qué estúpido!

Aunque Jungkook era muy guapo y podía ser divertido cuando quería, SeokJin no estaba seguro de que le cayera simpático. Cuando lo miraba, parecía decirle que lo encontraba lleno de carencias. Desconfiaba del interés que Jin sentía por Taehyung y parecía confuso por el que Taehyung demostraba por Jin. No obstante, SeokJin apreciaba la amistad que mostraba hacia Taehyung. Le había llevado ropa limpia y le había ayudado a vestirse mientras Jin aguardaba fuera, muy a su pesar.

La familia de Taehyung llegó justo cuando Jungkook se marchaba. Al ver lo mucho que parecían quererlo todos, sintió una cierta tristeza. Tenía una buena familia, amigos leales. Lo envidiaba por eso.

Con la esperanza de causarles mejor impresión que el día anterior, se había quitado la camiseta blanca para ponerse una rosa de manga corta, se arregló un poco el pelo y se había aplicado un poco de bálsamo labial.

En aquel momento, volvían a estar solos. Taehyung paseaba de un lado a otro de la habitación, esperando que un ordenanza le llevara una silla de ruedas. A pesar de que estaba sin afeitar y que tenía ojeras, a SeokJin le pareció que estaba muy guapo. Llevaba el brazo sujeto por un cabestrillo.

—¿Vive cerca tu familia?

—A un par de horas de aquí. Estoy seguro de que volverán el fin de semana. ¿Te importa?

—¿Que vengan a visitarte? Claro que no. Mientras estés conmigo quiero que te sientas muy cómodo. Quiero que sientas que mi casa también es la tuya.

Taehyung se quedó algo pensativo, como si deseara decir algo más. Entonces, sacudió la cabeza.

—Necesitamos dejar claras algunas cosas.

—¿Sí?

—Sí. Quiero que me prometas algunas cosas —dijo, acercándose a Jin.

El corazón de SeokJin empezó a latir a toda velocidad. Era un hombre alto, pero no como Taehyung. Cuando él lo miró a los ojos, Jin, sin poder evitarlo, se alzó un poco y le dio un beso en los labios. Él se quedó inmóvil, pero luego inclinó la cabeza para que sus bocas encajaran mejor juntas. Tomó a Jin entre su brazo, acariciándolo suavemente con su enorme mano. Al final, la colocó detrás de la nuca y lo inmovilizó contra su cuerpo.