Hell's Kitchen High ♡ Fratt

20: No tenemos idea

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Karen conversaba con Hope en el pasillo mientras caminaban a los baños del primer nivel, al inicio conversaron sobre apuntes de física y si tenía algo que valiese la pena para estudiar como una guía o resumen de clase que su padre haya hecho.

—Solo tengo uno que hice yo, mi papá empezó a guardar sus notas bajo llave porque dice que descubrió algo —explicó la joven—. Tal vez ese te sirva.

—Sí, ese está más que bien.

—Por cierto, ¿sabes qué pasa con Matt? —preguntó Pym porque durante la hora libre en la cafetería el pelirrojo parecía distante y evasivo cuando se le preguntó respecto a Scott.

—No tenemos idea —admitió Page abriendo la puerta.

Dentro habían algunas chicas y Karen no entendía porqué estaba tan lleno el lugar hasta que vio que se trataba de Maria y Trish Walker con varias amigas revoloteando alrededor.

Como moscas en la basura, pensó Jessica en un rincón. Se dio cuenta de la cantidad de gente en el lugar así que bufó y se retiró.

—Búscame cuando decidas dejar de oler mierda —exclamó Jessica a su hermana antes de irse.

Page entró a un cubículo y Hope a otro, pero no pudieron evitar escuchar lo que las porristas conversaban. Al inicio especulaban sobre Romanoff y su repentina falta, después unas empezaron a hablar cosas sobre Jones.

—Ella es tan rara —le dijeron a Walker—, no entiendo como puede ser tu hermana. Ella es tan... ella, y tú tan... tú.

"No es rara, solo algo dura consigo misma y los demás", pensó Patricia pero no importaba si lo decía, no le escucharían de todos modos.

—Por cierto, Patsy —le llamó Maria—,  ¿Recuerdas lo que te dije ayer en casa de Curtis?

—¿Qué? ¿Lo de que promocionara tu fiesta en el noticiero? —preguntó la rubia inclinándose al espejo y arreglando parte de su sutil maquillaje—. Ya te dije que lo haría.

—Sí, uh... hablo de lo otro —sonrió la joven—. Ya sé qué quiero como regalo de cumpleaños de tu parte.

—Espero que no sea un bolso caro, Maria, mi mamá casi me mata por regalarte uno el año pasado —bromeó la estrella infantil.

—No —rio la nerviosa chica— ¿Recuerdas lo que hablamos sobre... ese chico que me gusta?

—Ah, ¿Frank Castle? ¿Qué hay con él? —preguntó Patricia ordenando su cabellera pero se detuvo al escuchar la petición de la castaña—. No puedo secuestrarlo ni envolverlo si es lo que buscabas.

—No, algo más sutil... quiero que esparzas un rumor.

Page se mantuvo al margen del cubículo escuchando lo que las porristas tramaban para poder unir a su líder con el futbolista. Karen tenía que admitir que era un plan que podría funcionar... si no supiese lo que ella sabía.

—Pero... —comenzó a cuestionar Trish— ¿Cómo lo haré?

—Yo te diré cómo, haré mi parte al conseguir material y tú simplemente harás tu magia para esparcir la información —resumió la otra.

—Mi noticiero perdería credibilidad —murmuró la chica.

—¡Vamos! Solo es un noticiero escolar, ¿qué credibilidad puede tener de todos modos? —alentó una del grupo, la que llevaba un fleco a la altura de las ceja.

—La credibilidad que yo decida darle —respondió Walker frunciendo el ceño.

Podían cuestionar su programa de televisión o su forma de vestir en las premiaciones locales pero nunca dejaría que se metieran con ese pequeño segmento que, aunque irritante, era lo más realista en su vida.