PARTE #7
- Santiago: No quiero eso [haciendo un puchero] sabe feo.
- Teo: Santi, tienes que comer los vegetales, el día de ayer te lo pase.
- Santiago: [cruzándose de brazos] No quiero.
- Teo: Anda bebé come la sopa, está rica.
El pequeño seguía negándose a comer, Teo no sabía qué hacer para convencerlo.
- Teo: Te parece si después te compro un helado o unos dulces.
- Santiago: [haciendo un pucherito] Las que yo quiera.
- Teo: Las que tú quieras, bebé.
Dicho esto, el pequeño abrió su boquita y Teo lo fue alimentando. El mayor le dio hasta el último bocado y el pequeño tomó su vaso de jugo. Teo reanudó su desayuno y apenas terminó se llevó devuelta a la habitación y de ahí al baño de esta.
- Teo: [suspirando] Santi ahora toca bañarse, ¿Vale bebé?
- Santiago: Vale Teo.
- Teo: [retirándose] Te espero aquí afuera.
El mayor se iba a retirar del baño, el jovencito lo detuvo con su manita.
- Teo: ¿Pasa algo bebé?
- Santiago: [agachando su cabeza] Perdón, me porte mal abajo.
- Teo: [agachándose al tamaño del menor] No pasa nada, no te preocupes.
- Santiago: [abrazando a Teo] p-Teo discúlpame, yo seré un niño bueno.
- Teo: Te disculpo bebé, ¿Te parece si yo te doy tu bañito?
- Santiago: [asintiendo] Si p-Teo.
El mayor desabotonó el pijama, está cayó al suelo dejando al pequeño únicamente con su calzoncillo, a partir de ese punto el mayor se puso nervioso al sostener los bordes del calzoncillo del pequeño y bajarlo y dejando completamente desnudo al niño. Ambos sintieron vergüenza.
- Teo: cof... cof... Bien, pequeño [tomando la mano de Santiago] ahora si a bañarte.
Teo llevó al pequeño a la ducha, lo primero que hizo fue mojarlo un poco, tomó el bote del shampoo y echó una buena cantidad en el cabello de Santiago, la espuma se formó, el pequeño sonrió atrás de la nube de espuma que se había formado en su rostro. El mayor abrió la llave y el agua deslumbró al pequeño, Teo tomó el jabón en sus manos junto con una esponja, le empezó a tallar los bracitos del pequeño, como en sus piernas, siguió su espalda. El mayor suspiro y empezó a tallar las nalguitas del menor, limpiando también sus genitales.
El pequeño tuvo nuevamente una erección, era de esperarse, pero Teo aún con vergüenza solo se limitó a seguir con el baño, el pequeño quedó totalmente limpio. El mayor lo envolvió en una toalla y lo llevó a la habitación, le empezó a secar el cuerpo, le esparció crema por todo su cuerpecito. El menor ya no se tapaba como el día anterior, total Teo ya lo había visto desnudo y no le había hecho nada.
El mayor le fue colocando su ropita, comenzó con un calzoncillo con dibujitos de aviones, una playera blanca junto a un corbatín, un short con tirantes, unos calcetines y por último los zapatos.
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EL PEQUEÑO DE PAPI
Teen FictionLa vida de 2 jóvenes con vidas totalmente distintas, dieron un giro sorprendente en sus vidas cuando se conocieron. El menor era el blanco de múltiples abusos no solo por sus compañeros sino también de aquellos quien él consideraba su familia. Sin...
