Vulnerable. Esa era la palabra que había descrito a Natalie Dankworth desde sus dieciséis años, cuando sus sueños de vivir felizmente se rompieron junto con su familia.
¿Para el amor? Siempre tomó la decisión errónea, cosa que le hizo cerrarle las p...
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—¿Tú aquí?
Miré a Hiddleston con la misma cara de sorpresa que tenía él plasmada, luego observó a Charlie y por su mirada supe que estaba armándose hilos en su cabezota.
—Esperé encontrarte en cualquier lugar pero no aquí.— dijo Tom.
—¿Ustedes se conocen?— ambos miramos a Charlie.
—Sip, nos hicimos amigos por Dinora y Tom es de los que piensa que su casa es un hotel.— respondí.
—¡Oye!— frunció el ceño. —nah, tienes razón su casa es la mejor, no lo voy a negar.— se encogió de hombros y yo rodé los ojos.
—No sabía que ustedes eran amigos.— dije viendo a los ingleses.
—Ya ves lo pequeño que es el mundo.— acotó Tom y Charlie asintió de acuerdo.
—Entonces pasemos.— Charlie fue el primero en entrar. Hiddleston estaba por seguirle el paso pero lo tome del hombro y hablé.
—Si le dices a Ryan de esto te golpeo, ya ves como se pone luego.— murmuré.
—Tu secreto está a salvo conmigo.— movió sus cejas de arriba para abajo y negué divertida.
—Bien ahora dime que mis ojos no me fallan y que la persona que estoy viendo de verdad es Andrew Garfield comiéndose un pedazo de pizza.— susurré cerca de su rostro haciéndolo reír.
—Si es él, es uno de los mejores amigos de tu novio, ¿no sabías?
Lo miré mal ante lo dicho.
—No, no lo sabía.
—¿Qué esperas? Vamos a saludarlo y no te vayas a hacer pis encima, te lo advierto Natalie.
—No prometo nada.
Tom hizo una mueca de asco, luego me tomo de los hombros y me hizo caminar con él hasta donde Andrew, Charlie y un chico rubio conversaban animadamente.
***
Charlie escuchaba atentamente como Andrew les relataba la experiencia que había sido grabar su nueva película Silence, la cual había sido dirigida por Scorsese.
—Fue increíble y hubieron momentos duros pero...— la mirada del inglés dejó de prestarle atención a su amigo y se dirigió hacia Natalie y Hiddleston quienes venían en su dirección.
—¿De qué hablan?— interrogó Tom uniéndose a la conversación de los tres hombres.
—De la nueva película de Andrew.— respondió Steve, el rubio.
—Scorsese es un genio.— murmuró Garfield llevándose la pizza a la boca para luego disfrutarla. Sus ojos pasaron del alimento a la única chica presente y luego frunció el ceño.
