—Sí, señora.

—Hoy no pararemos para comer, avisen a todos y pónganse a trabajar...Yo debo buscar a mi marido.

Salió de la casa llevando su vestido de la nueva moda "forma natural", que no tenía ningún polisón abultando la falda, salvo unos pequeños accesorios que iban por debajo dándole un volumen algo interesante. Su vestido era de una sola pieza y se arrastraba por el suelo, con una capa protectora debajo para que no se dañara la tela.

Jonathan estaba con su nuevo caballo, que le había llegado el miércoles después de comprarlo, pero por todo lo que había sucedido no había tenido el tiempo de entrenarlo. Ahora que había despertado temprano en la madrugada para estar con ella, había descubierto rápidamente que no era tan agresiva como había parecido mientras estaba con el vendedor del establo. Quizás ella no estaba cómoda en aquel lugar y por eso se ponía a la defensiva.

Cuando Olivia llegó a él, Jonathan se bajó de su nuevo caballo (a quién había llamado Faith) y se apoyó en el cerco esperando a que ella le alcanzara.

—Recibimos una carta de Lord Kimberley, al parecer vendrá a hospedarse con nosotros por unas semanas antes de continuar su viaje —. Jonathan empezó a reírse mientras alcanzaba su sombrero y salía del recinto—. Vendrá esta tarde, Jona...Tengo a todo el mundo en la casa ordenando. Este podría ser un momento importante para nosotros.

—No seas ilusa, Olivia, ese hombre solo viene por Amelia.

—Pues ya lo sé, pero igual...Su presencia ayudara a nuestra reputación y es muy bueno ¿sabes? Con la posibilidad de que Emma este embarazada, nadie le prestara atención a ella si tenemos a un Lord en nuestra casa...Además sus hijas querían venir.

—Sus hijas lo que quieren es una madre —comentó riéndose—. Pero está bien, preparen todo para recibirlo.

—Debes estar para la cena.

—Estaré, pero debo irme. Quedé en acompañar al sheriff para desalojar al grupo quedándose cerca de Money Creek. ¿Segura qué es buena idea recibir a un Lord con ese asunto aun en nuestras manos?

—Lo había olvidado...Mierda, pero se verá mal si lo rechazo y perderemos una buena oportunidad, Jona.

—Tienes razón —. Tomó su mano, que estaba cubierta por unos guantes azules y besó sus nudillos—. Tu prepara todo para recibirlos y asegúrate de que no crucen Oak Pines, yo me encargaré de echar a ese grupo antes de que sean un problema.

Entraron en la casa y encontraron que todo era un caos absoluto.

Las mucamas corrían de un lado para otro sacudiendo cada rincón, lustrando cada adorno, sacando brillo al piso, etcétera. Algunas se llevaban las enormes alfombras de todas las habitaciones para sacudirlas en un largo proceso que requería colgarlas y golpearlas con unos pesados palos que removerían todo el polvo. La casa tenía demasiadas alfombras y al menos diez personas debían dedicarse únicamente a eso. Tenían otras mujeres limpiando los dormitorios y preparando aquellos que utilizaría Lord Kimberley y cada uno de sus seis hijos.

En la cocina había otro alboroto, Charlotte debía encargar aun más comida para llenar los armarios y asegurarse de que lo tendrían todo para alimentar a la familia y sus invitados. Las dos cocineras estaban empezando a dividirse los trabajos, Cooper se encargaría de las comidas y Davis de los postres, de esa forma lo tendrían todo servido en la mesa a tiempo.

Los mozos lustraban todos los utensilios de plata que estarían usando para servir la mesa. También lustraban todos los adornos de plata que había en la casa y los zapatos de cada miembro de la familia, para que estuvieran impecable durante la visita. Edgar organizaba los vinos para las comidas de la semana, en relación con lo que se serviría y también revisaba que todas las tareas de todos los empleados (hombres y/o mujeres) fueran realizada a la perfección.

Vidas cruzadas: El ciclo. #2 COMPLETA. +18. BORRADORDove le storie prendono vita. Scoprilo ora