Despues del desayuno, yuzu se dirigio a la gran biblioteca que tenia la mansion, tomo un libro de uno de los estantes y se sento en uno de los tantos sillones que habian, se encontraba profundamente concentrada en su lectura hasta que escucho unos pasos acercandose, levanto su vista viendo a la chica castaña frente a ella.

- Hola, mi querida Yuzuko.

- ¿que quieres?.. solo largate. No quiero saber de ti.

La castaña la miraba con una sonrisa.. hasta cambiar su expresion a una totalmente seria, lagrimas caían por los ojos de la otra chica que salio corriendo de la biblioteca dejandola por fin sola... lastima que no duro nada. Unas fuertes y ruidosas pisadas se escucharon, no le dio tiempo de reaccionar cuando una mano apretaba fuertemente su cuello dejandola sin aire, la mujer tiro con fuerza a la rubia quien se estrello contra una pared causandole un dolor fuerte en su cabeza y espalda.

- ¡te prohibo insultar de nuevo a Emily!... solo no golpeo esa horrenda cara que tienes por la cena... pero no durara mucho.

- ...

- solo eres una perra que le lava el cerebro a cualquiera..

La pelinegra salio de la biblioteca dejando a su esposa sola sollozando, esta se termino desmayando por el fuerte golpe, Marcus entro rapidamente segundos despues, sentia su sangre hervir de rabia, cargo a la chica y la llevo a su habitacion.

Dejo a la chica en su cama despues de revisar que no tuviera alguna herida grave.

- lo siento mucho yuzu-chan.. fue un completo error que te hubieras casado con ella..

Acaricio sus suaves cabellos dorados, cambiando su rostro a uno completamente serio.

- cuando su abuelo llegue... se encargara de ella..

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La aihara se encontraba en la casa de su pareja, en la cama de esta. Estaba esperando a su amada castaña para poder dormir con ella. Cuando la vio salir del baño ya con su pillama puesta le hizo un espacio para que esta se acostara a su lado. La castaña se acerco y se acurruco a lado de la mujer pelinegra.

- te amo..

- yo tambien te amo cielo.

Mei la miraba como si fuera su adoracion, la mujer perfecta, le dio un beso en la frente, apago la luz de la lampara y se acosto alado de su querida Emily.

Mientras tanto yuzu se encontraba despierta, sentada en su cama, lagrimas caían por sus bellos ojos verdes cubiertos por un brillo de tristeza, le dolía.. le dolía mucho que su esposa no la visitara, ella la amaba, yuzu la amaba con todo su corazón, no sabia cuanto más podria aguantar ese dolor que desgarraba su corazón.

- yo.. aún te amo tanto mei... y me odio por eso.. me odio por seguir amandote.. ¿porque te casaste conmigo si no me amas..? ... ¿que hice mal?

Se quedo unos momentos más sentada limpiando sus lagrimas hasta quedar totalmente dormida con lagrimas aún en sus ojos.

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A la mañana siguiente yuzuko sintio un pequeño picor en sus ojos, recordo haber llorado a altas horas de la madrugada, se levanto dispuesta a tomar un baño y bajar para esperar a mei.
Ya se encontraba en la mesa del comedor, teniendo la esperanza de que mei llegara y almenos quiera desayunar con ella. Marcus se encontraba cerca de la mesa, esperando junto a yuzu, escucharon la puerta principal abrirse y unas pisadas acercarse, mei se dejo ver con su tipica expresion de seriedad.

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