¿Podría Conocerte? - Peter Parker

Capitulo 30

Narra Peter Parker

La había besado.

Besé a _____.

Y me sentía... Lleno. Pero al mismo tiempo los nervios me comieron por dentro.

Aparté mis manos de su cintura y pase mis manos por mi cabello. Ella me miraba confundida.

-L-lo siento mucho. N-no e-era mi intención besarte sin tu p-permiso. Entiendo si estás enojada o ya no...

Me besó de nuevo para callarme. Fue un beso que duró menos que el anterior cuando nos separamos, estábamos aún cerca.

-No me molestó-. Empezó a decir. -Y no me arrepiento de lo que pasó.

-Ni yo. Solo, ¿Q-que somos?

Empezó a jugar con mi cabello.

-Ay que ir lento. No hay que apresurar las cosas.

Asentí con la cabeza. Estábamos tan bien juntos, hasta que sonó mi celular. _____  soltó un lamentó y yo reí.

A regañadientes contesté el teléfono.

-¡Peter Benjamín Parker! ¡Me puedes decir!, ¡¿En dónde carajos estás?!

El teléfono casi se cae de mis manos por los gritos al otro lado de la llamada.

-May. Estoy en la torre Stark...

-¡Me vale un pepino! ¡Te pedí hace más de dos horas los huevos Parker!... Por cierto le mandas saludos a _____ de mi parte.

Sonreí incómodo.

-Voy para allá.

-Más te vale benjamín.

-May, sabes que ese nombre no...-. Me colgó.

Al parecer may, _____ y el señor Stark tienen algo en común: cortar la llamada como si nada.

-Te tienes que ir, ¿Verdad? - La miré confundido. -Se escucharon los gritos hasta acá-. Me aclaró.

-Lo siento mucho.

Sonrió.

-No te preocupes, entiendo benjamin-. Se burló.

Le di una mirada de pocos amigos.

Me despedí de ella y salí de su cuarto sonriendo.

-Espero que hayan usado protección-. Dijo una voz así sobresaltandome.

Voltee a ver a la persona y me encontré con Harley sosteniendo un gran bote de helado de fresa. Y ni hablar de la cuchara.

-N-no hicimos nada d-de l-lo que p-piensas-. Le respondí muy nervioso.

El rió.

-Tranquilo, no soy Tony. Ven, quiero hablar contigo.

Empezó a caminar hacia su habitación y yo lo seguí. Entramos y me invitó a sentarme en uno de los sillones que habían ahí.

Su cuarto parecía una sala de robótica. Habían demasiadas herramientas para arreglar robots.

La pared de su cama era de azul rey, y tenía unos estantes con algunas fotos.

-Mira, se que te gusta ____, y se que tú le gustas a ella-. ¿Que todos en esta familia son así de directos? -No te voy a amenazar ni ponerte restricciones, pero lo único que te voy a pedir es que no la lastimes.

Me quedé pensativo, ¿Yo? ¿Lastimarla a ella?

-Nunca lo haría-. Le respondí seguro.

-Más te vale Parker, por qué le haces algo y me convierto en Tony o peor.