XIII | El hombre alado

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     EL AVIÓN SE IBA A ESTRELLAR

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     EL AVIÓN SE IBA A ESTRELLAR.

La caída era inevitable, y Lyann sintió su estómago brincar y atorarse en su garganta. Su predicción estuvo acertada; sabía que esto sucedería incluso antes de abordar y despegar. No obstante, los motores estaban fallando con mucha más rapidez de lo que anticipó, y toda la culpa la tenían Peter Parker y Vulture, que peleaban justo fuera del avión, en pleno aire, mientras Lyann trataba de que el aeroplano cooperase.

Otro de los propulsores explotó, activó más alarmas en la cabina de control, sacudió un costado del avión y sacó una lista de maldiciones de la boca de Lyann. Empezaban a perder altura, descendiendo a una peligrosa velocidad. El radio-comunicador funcionaba y la voz de Happy era irritante, pero Lyann sólo le dijo que no se preocupase, que lo tenía bajo control. Pensó que ver el avión desde el tope de la Torre Stark debería ser tremenda vista; Lyann se echó a reír, aunque no supo si se trataba de un ataque de nervios o la adrenalina nublando sus emociones.

El suelo se aproximaba cada vez más, y con él, la ciudad de Nueva York.

Lyann respiró hondo, agarró el timón y planeó el avión hacia un lado.

—Vamos, vamos, vamos —masculló entre dientes, esquivando rascacielos y casas por alguna fuerza divina del universo.

Hasta que una de las alas chocó con una señal de un parque de diversiones cerca del mar...

Lyann corrió fuera de la cabina, fue casi enviada a volar por los enormes huecos que la pelea creó en la zona de cargamento y enseguida notó a Vulture sujeto al avión. Actuó sin pensarlo y envió su grito hacia él justo cuando el avión tocaba suelo, explotaba y ella salía volando al activar el paracaídas.

No sirvió de mucho, partes del avión se desprendían y volaban en el aire. Fuego alcanzó la tela del paracaídas y Lyann cayó al suelo. La diferencia de altura no era tanta, pero no pudo ablandar la caída a tiempo y rodó por el suelo. Lyann logró activar el escudo de sus sables justo antes de caer de relleno a una brasa de fuego que ardía en el suelo.

Se permitió sólo cinco segundos para asimilar lo que acababa de suceder.

Luego...

—¡Parker! —llamó. Era difícil ver entre la llamarada y el humo, pero Lyann halló a Peter entre el mar de fuego. Gritó por él, aunque el chico no parecía oírla. El rugido del fuego era bastante ruidoso, las explosiones aún más.

Luego Vulture se abalanzó sobre él.

—¡NO!

Usó su grito para alzarse, activó sus sables, caminó sobre las alas de Vulture y golpeó su casco con sus sables electrificados, y mientras aterrizaba, Peter atacó.

El chico estaba débil, sin embargo, y no usaba el traje hecho por Tony Stark, así que estaba más expuesto que de costumbre. Vulture lo tomó con una de sus garras mecánicas y se alzó al aire, para luego soltarlo. Peter chilló y lanzó una telaraña, pero el grito de Lyann lo empujó hacia la arena en vez de caer sobre piezas puntiagudas del avión.

[2] Banshee II | Spider-Man: HomecomingOù les histoires vivent. Découvrez maintenant