Capítulo XVI.

1K 68 22
                                    


De regreso a mi vieja habitación. Le indico a Tom donde puede dormir.

-Hasta mañana-le doy un corto beso en la frente, él se retira a donde una musa lo llevara a su nuevo cuarto.

Alguien toca la puerta.

-Pasé-digo quitándome la capucha de mi cuerpo, dejando ver mis brazos y piernas llenas de marcas blancas.

-Te traje estas mantas-Kill deja unas sábanas limpias sobre el borde de la cama-Me alegra que hayas regresado-dice sonriéndome.

-Me da gusto volver a verte Kill, pero ya sabes, debes alimentarte mejor-digo recordando su casi esquelético cuerpo.

Kill asiente apenada y se retira de mi habitación.

Camino a la cama y tomo las mantas, me dirijo al tocador y las dejo al borde de ella.

Vuelven a tocar la puerta.

-Pasa Kill, ¿se te olvido algo?-pregunto acomodando las mantas dentro de los cajones.

-No soy Kill.

Miro hacia la puerta y veo a Atem cerrándola.

-¿Se te ofrece algo?-pregunto.

-Quería hablar contigo-dice dando un paso al frente.

Me dirijo al buro que esta frente a la cama y me siento sobre él.

-¿Dime?

-Yo... quería pedirte disculpas-dice Atem sentándose a mi lado.

-Disculpas aceptadas-digo asintiendo con la cabeza.

Atem acerca su rostro al mío. Siento su respiración en mi mejilla.

-Lo que te dije, eso de que no voy a dejarte de nuevo ir, es enserio-susurra.

Lo miro seria.

-¿A qué quieres llegar con eso?

-Se que eh sido un tonto, uno muy grande, pero quiero estar contigo, quiero ser feliz contigo, tu eres a quien realmente amo-dice Atem, al finalizar de hablar me besa.

Siento como sus manos tocan mi cara, apretando levemente para profundizar el beso. Cuando termino me miro con esos ojos morados directamente. Le sonrió.

-Yo también quiero ser feliz contigo-digo susurrándole.

El sonríe de oreja a oreja.

* ADVERTENCIA: Actos sexuales.

-Yo... nose que más decir-digo al ver que no me respondía.

Atem sonríe pícaramente, luego me besa con desesperación.

Me alza entre sus brazos y se pará solo para caminar a la cama, aun besándonos me recuesta en ella.

-Espera...

-Puedo parar si no quieres-dice Atem un poco decepcionado.

-No es eso...-miro a un lado- Es mi primera vez- al terminar Atem no disimula y sonríe a más no poder.

-Seré lindo-dice colocándose un poco sobre mí.

Lo miro como tonta.

Atem me besa y siento como sus manos comienzan un intento por quitarme la ropa que traigo puesta. Meto mis manos a su capa y se la quito con algo de dificultad.

Tardamos un poco más en quedar sin ropa.

Atem se separa un poco de mi para poder respirar un poco.

Se acerca a mí con lujuria, no me deja respirar mucho para poder besarme de nuevo pero esta vez no hay desesperación, es lento y dulce. Noto como su entre pierna me roza y me torso un poco.

-Tranquila-dice con dificultad, se le nota que esta excitado.

Me calmo un poco y siento como entra en mí. Es realmente doloroso, duele demasiado pero ese dolor se va poco a poco.

Como entra una y otra vez con fuerza en mi. Siento como se corre dentro de mí y yo también. Atem se tira a mi lado cansado, excitado.

Me sonríe y se acomoda de cierta forma para abrazarme.

* FIN DE ADVERTENCIA.

-No sabes, como te amo-dice susurrando con dificultad- descansa-me da un beso en la frente.

Me acomodo más a su pecho- Descansa tu también-le susurro.

La luz molesta mis ojos y los abro quejándome un poco.

Por primera vez en un año, pude dormir.

Descanse en los brazos de Atem.

-Buenos días-escucho decir cerca de mi oído.

Me giro para encontrarme con Atem despierto, le sonrió.

Pero no duro mucho con ella, estoy apenada, estamos desnudos en mi cama, en mi habitación, en cualquier momento alguien puede tocar la puerta, y peor si es Tom.

-¿Por qué esa cara?-pregunta sin entender Atem.

-No es por arruinar nada, pero estamos desnudos en mi habitación-digo apenada.

Atem ríe.

Lo miro seria.

Atem para de reír, y luego sonríe.

-¿Te casarías conmigo, por favor?-dice reabrazandome contra su pecho, como si le temiera a que desaparezca, y no lo culpo, quiero desaparecer, pero no lo hare.

Sonrió.

-¿Eso es un sí?-pregunta preocupado.



-Sí.

EL FARAON ATEM ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora