Viendo •Como entrenar a tu dragón•

14- No tenemos que matarlos

Cuando llegaron devuelta a la cala Hipo y Astrid estaban sumidos en una conversacion.

—Tiene mucho sentido son los obreros, ella es la reina y los controla— Dice bajándose de Toothless— Busquemos a tu padre.

—¡NO!— Gritaron todos los amantes de dragones.

—¡No!— Hipo se baja de Toothless corriendo hacia Astrid— Van a matar a Toothless No, Astrid tenemos que pensar bien esto.

Hipo se aleja un poco de Astrid mientras esta lo mira incrédula.

—Hipo acabamos de descubrir el nido de los dragones, lo que los vikingos buscamos desde que llegamos aquí— Dice Astrid mirando hacia arriba— Y quieres guardar el secreto ah... para proteger a tu dragón mascota ¿Es encerio?

—Yo no soy una mascota— Se quejó Toothless.

—Y yo que iba a saber— Se defendió Astrid sin mirarlo

Aún le dolía que el se uniera a Hipo en una pocas semanas y ella no pudo ni ser su amiga en todos esos años.

—¿Mascota?— Pregunta Toothless sin prestas realmente atención.

Hipo se da la vuelta mirando a Astrid con mucha seguridad.

—Si— Dice como única respuesta muy convencido. Astrid lo mira sorprendida.

Toothless sonrió e Hipo le devolvió la sonrisa, El azabache lo abrazó más acercándolo más, si era posible, a él.

—De acuerdo...entonces ¿ahora que?

—Solo dame hasta mañana pensaré en una solución— Dice sin mirarla.

—De acuerdo— Dice Astrid y luego lo golpea en el brazo— Esto es por raptarme.

—¿Enserio?— Dijeron varios mirándola.

Ella Simplemente se encogió de hombros sin mirar a nadie más que la pantalla.

Hipo mira a toothless quien estaba tomando agua y no le puso mucha atención. En eso Astrid lo agarra del chaleco y le da un beso en la mejilla.

Toothless Gruñe con evidentes celos. Hipo se ríe por lo bajo.

—Y esto... Por todo lo demás— Dicho esto se fue corriendo.

Hipo se quedó mirando un la dirección en la que Astrid se fue cuando toothless en su forma humana se para a su lado.

—Y... Tu que estas mirando— dice nervioso, toothless niega lentamente y lo besa.

—Estoy mirando como una humana besa a mi pareja— Se quejó Toothless abrazando a Hipo de una manera muy posesiva.

Al día siguiente
En el ruedo la arena estaba completamente rodeada de vikingos que vitoreaban mirando a Estoico.

—Bueno puedo volver a mostrar mi cara en publico— Dice estoico y todos ríen.

—¿Que quieres decir con eso?— Preguntaron las tres aldeas más junto a los dragones.

—Si alguien me hubiera dicho que en unas pocas semanas Hipo iba a dejar ser bueno... Hipo, a ser el primero del entrenamiento de dragones, lo hubiera amarrado a un mástil y lo hubiera lanzado al mar. Por temor a la demencia— Volvió a gritar y de nuevo se escucharon las risas.

Hipo bajo la cabeza, apesar de estar acostumbrado a todo eso aún le dolía. Toothless lo miró y le susurro algunas palabras bonitas para tranquilizarlo.