Capítulo 11

8.2K 1.1K 2.2K
                                    

| Intentando |

-no puedo creer que no hayas comido en todo el día... -me regañó Tony mientras yo comía un maruchan que me había dado, a pesar de que era suyo.

Había vendado mi mano herida para luego darme comida cuando se enteró de que me había descuidado todo el día.

-no me queda mucho dinero. -admití mientras comía con la cabeza baja.

-no por eso vas a ahorrar matándote de hambre, tonta... -bufó mirando hacia el lado mientras sacaba un cigarrillo de su pantalón.

-ya lo hice una vez. -lo miré mientras él botaba el humo hacia un lado de la sala- no comí por tres días a los once años... y nadie se dio cuenta. -volvi a agachar la mirada para seguir comiendo.

-nuestra infancia fue una mierda y lo sabes... vamos, ni si quiera conocí a mi madre. -se encogió de hombros.

Ambos estábamos sentados en el sillón mirando hacia el frente.

-tal vez algún día puedas verla.

-no... quien sabe qué tipo de persona es, o si tiene otra familia... tsk. No lo sé. -siguió fumando con la mirada baja.

Tony siempre fue algo reservado, era casi igual que yo, si tenía que desquitarse... era como la mierda con todo el mundo.

Nos quedamos en silencio mientras yo terminaba de comer lo que me había dado y él terminaba su cigarrillo, ambos en total silencio.

Cuando terminamos, cada uno fue a acostarse a sus camas, ninguno dormía en pijama así que una vez nos acostamos él tiro sus pantalones desde arriba y yo quité mi falda dejándola encima de mi cama mientras me cubría con las mantas, no me dormí de inmediato al pensar en lo de esta noche, en Keisuke...

¿De verdad me hubiera lanzado si no me hubiese hecho entrar en razón?

*°°°*

Al día siguiente, Tony ya se había ido a la escuela, por mi parte me puse ropa casual luego de haberme duchado, cambiar las vendas y ordenar un poco mi cama, aunque una nota en la mesita de noche llamó mi atención.

"Ay comida en la nebera puedes sacar o ir a comprar con tu dinero"

Dios Tony, esa ortografía...

Lo dejé pasar mientras dejaba la nota ahí mismo, sacando algo de mi dinero para ir a comprar más tarde, después de todo aun era muy temprano.

Mi madre se encontraba en la sala, contando algunos billetes. Yo solamente me quedé de pie a un lado de la puerta observándola.

-¿qué? -preguntó volteando a verme.

Yo solo negué en respuesta mientras ella seguía en lo suyo, la verdad la presencia de mi madre a veces me incomodaba, pero intentaba ignorar eso.

-hoy vendrá el hombre con el que estoy saliendo, Tony y tu tendrán que comportarse. -dijo sin mirarme.

-¿tenemos que estar en casa? -la verdad me daba igual con quien saliera mi madre.

-si. Tienen que estarlo. -se me quedó viendo a los ojos por unos segundos para luego seguir en lo suyo.

Suspiré mientras sacaba una sudadera para luego ir hacía la puerta de entrada.

ℳℯ𝓈ℯ𝓈【𝐊𝐞𝐢𝐬𝐮𝐤𝐞 𝐁𝐚𝐣𝐢 𝐱 𝐎𝐜】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora