VIII. 𝐄𝐋 𝐀𝐌𝐎𝐑 𝐃𝐄𝐒𝐏𝐔𝐄́𝐒 𝐃𝐄 𝐋𝐀 𝐌𝐔𝐄𝐑𝐓𝐄

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Matsuyama y Machiko consolaban a Yoshiko en el baño.

─Ya, Yoshiko, tranquila. Esas personas no existen en este mundo. No tienes por qué recordarlos─ le dijo Machiko, su mejor amiga, para consolarla.

─Es que... intento olvidarlos, ¡pero de alguna forma esos chicos aparecen en mi cabeza y me empiezan a insultar y a golpear!

─Yoshiko...

─¡Y esos hombres se acercan a mí y me...!

En eso golpean la puerta del cubículo del baño.

─Disculpen, ¿pero podemos pasar?─ eran Yukari y Kumi.

─¿Podrían esperar unos minutos? Yoshiko está sensible─ les respondió Machiko.

─Oh, perdón. Es que enserio necesito hacer pis antes de ensayar nuestra canción─ dijo Kumi, cruzando las piernas y agarrándose su zona con ambas manos para evitar hacerse encima.

─Anda a hacer en los árboles afuera─ le dijo Matsuyama.

─¡Ah, pero qué falta de cerebro, señor!─ exclamó Yukari─¡Somos mujeres, no podemos hacer pis en las plantas como animales salvajes! ¡Podría vernos cualquiera de ustedes!

─¡Y se aguantan! ¡Qué sé yo!

Yoshiko empezó a reír con ganas por la discusión en el pequeño recinto del baño. Machiko sonrió al ver a su amiga sentirse mejor.

─Yoshiko, si quieres descansar en paz debes decirle lo que sientes a Matsuyama, o todo lo que sufriste te seguirá destruyendo por dentro─ pensó, recordando las cosas horribles que vivió su amiga cuando aún estaba viva...

─Oigan, ¿podrían dejar de gritar?─ pidió Ishizaki en la puerta del baño.

─¡Lárgate, mono! ¡Estamos en medio de algo!─ exclamaron Kumi, Yukari y Matsuyama.

Ishizaki se fue corriendo.

─¿Cuál fue el mal que yo hice?─ pensó mientras caminaba por el pasillo─Lo único que quiero es a alguien que me ame, me diga que soy guapo, que valgo... pero siempre me gritan y se burlan de mí. Si tuviera una novia, sería feliz y podría ir a descansar en paz...


─Misaki─ le habló Tsubasa.

─¿Qué pasa?

─Antes de ayudar a Yoshiko, ¿me puedes decir qué le pasó?

─De acuerdo, pero no es una historia feliz.

─Me imagino.

Misaki le contó a Tsubasa la historia de Yoshiko, que involucraba a Machiko y a Matsuyama. 

Yoshiko sufría bullying en la escuela, tanto verbal como físico. La insultaban, le tiraban papeles en clase, en el baño metían su cabeza en el retrete... montones de cosas horribles que fueron convirtiendo a Yoshiko en una persona depresiva. Lo único que salvó a Yoshiko de suicidarse fue su eterno amor hacia Matsuyama, quien en unas cuantas ocasiones la ayudó con los golpes de parte de sus compañeros, pero nunca supo de sus sentimientos por él, y ella nunca tuvo el valor de confesárselo. También subía al techo de su casa todas las noches sin que la vieran para llorarle a la luna, a las estrellas, a los astros, a todo el universo. Cada cuerpo celeste que ocupara en el espacio. Y pensaba: "Voy a ser feliz algún día".

Sin embargo, eso no fue lo peor. Un día cuando ella salía de la escuela, una camioneta con cuatro hombres se la llevó. Muy lejos. Machiko fue la única que la vio, y le dijo al director de su escuela, también llamó a la policía. Matsuyama al enterarse del secuestro de Yoshiko, quedó en shock, y decidió acompañar a Yoshiko y a la policía a buscarla.

𝗟𝗔𝗧𝗜𝗗𝗢𝗦 𝗘𝗧𝗘𝗥𝗡𝗢𝗦 ❱ Capitán Tsubasa ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora