To Sir, With Love // Ziam

18: The Kings of Summer

El primer instinto de Zayn fue darse la vuelta y correr. Correr tan lejos como sus piernas le permitieran. Lejos de Perrie, lejos de Shahid. Lejos de la evidencia que lo estaba mirando a la cara. Pero Perrie ya estaba corriendo hacia ellos, con los ojos muy abiertos por la sorpresa, y los pies de Zayn se sintieron clavados en el suelo.

"¿Qué demonios, Zayn?", siseó mientras se agachaba para ayudar a Shahid a levantarse.

"No, ¿qué coño, Perrie? ¿Cómo no me has dicho que estás embarazada?" Preguntó Zayn, con su ira encendida una vez más.

"Lo siento, no era consciente de que tenía que contarte todo lo que pasa en mi vida", respondió Perrie con sorna. Apenas le dedicó una mirada a Zayn, toda su atención se centró en Shahid.

"¿No pensaste que debías decirme que voy a ser padre?"

"¿Qué?", preguntó ella, dándose la vuelta para mirarlo. "Zayn, este no es tu bebé. Te pusiste un condón esa noche, ¿recuerdas?".

Zayn no lo recordaba, en realidad. Apenas recordaba detalles de las noches de borrachera que había pasado alejado de Liam.

"¿Estás segura? ¿Estás segura de que no es mío?", preguntó, con la voz tensa mientras intentaba contener su felicidad hasta saber que lo que ella decía era cien por cien cierto.

"Sí, estoy segura. Mira mi barriga. ¿Crees que sería tan grande si me hubiera quedado embarazada esa noche? Ya estaba embarazada, sólo que no lo sabía. El bebé es de Shah".

Zayn se sintió más ligero que en semanas; tan ligero que podría salir flotando. Sintió que Niall le tiraba del brazo, tratando de llevarlo hacia la salida, y de repente Zayn no pudo salir de allí lo suficientemente rápido. No podía llegar con Liam lo suficientemente rápido.

Se despidió rápidamente de Niall y condujo como un loco hasta el piso de Liam. La espera del ascensor parecía interminable, así que subió corriendo los cinco tramos de escaleras. Se quedó sin aliento cuando buscó a tientas su llave e irrumpió en el salón, y Liam parecía aterrado cuando se levantó del sofá y contempló las mejillas sonrojadas y los ojos brillantes de Zayn.

"¡Liam!" gritó Zayn, chocando su cuerpo contra el del mayor. "¡Perrie no está embarazada! Es decir, lo está, totalmente, pero no es mío, ¡así que a quién le importa!"

Liam tiró de él en el mayor y más apretado abrazo que jamás había tenido, levantando sus pies del suelo y haciéndolo girar en un pequeño círculo. El duro yeso que presionaba la parte baja de la espalda de Zayn era un duro recordatorio de toda la mierda por la que les había hecho pasar Shahid, pero todo lo que sintió en ese momento fue alivio. Alivio porque el bebé no era suyo. Alivio de que Liam lo fuera.

Acomodó su cabeza en el cuello de Liam mientras lo dejaba en el suelo, sin querer dejarlo ir todavía. Los dos tropezaron con el sofá envueltos el uno en el otro, los labios de Zayn encontraron la mandíbula de Liam y los dedos de éste se clavaron en la cintura de Zayn. Se desplomaron en el sofá cuando sus labios se encontraron por fin, su alegría era palpable en el aire que los rodeaba. Zayn se dio cuenta por primera vez de que Liam había estado tan preocupado por Perrie y el bebé como él. Esto les parecía una segunda oportunidad a los dos. Una segunda oportunidad para hacerlo todo mejor y para no dejar que nadie se interpusiera entre ellos nunca más.

Su noticia perfecta condujo a una noche perfecta seguida de un día perfecto que se convirtió en un verano perfecto, lleno de sexo, sol, noches de cine y margaritas. Claro, estaban encerrados en el piso de Liam casi todo el tiempo, pero en los días soleados subían a la azotea, con las bebidas en la mano y la música sonando suavemente. A los días calurosos en la azotea les seguían noches aún más calurosas, que pasaban en cualquier superficie que pudieran encontrar. No se cansaban el uno del otro, y Zayn sentía que se enamoraba más y más cada día, cada nuevo dato que aprendía sobre Liam sólo hacía que lo amara más.