Esa noche Dominik no paraba de hacerle preguntas a Violeta sobre cómo le había ido en la salida con su madre, qué más habían hecho y, sobre todo, de qué habían hablado. Quería detalles, y lo entendía, pero lo cierto era que sentía que esa conversación debía quedarse entre las dos, así que ante cada nueva pregunta se limitaba a responder, tal como lo había hecho Adelaide horas atrás: cosas de chicas. Lo decía siempre con una sonrisa, y evitaba su mirada para que él no pudiese ver el rubor en sus mejillas. Era tonto, pero esa confidencialidad que habían logrado en el salón de la peluquería había significado mucho para ella.
—Bien, no me digas —replicó él, cruzando los brazos como un niño pequeño—. Te ves hermosa, por cierto. Ese corte te queda... y los lentes también.
Violeta
La mañana del jueves, mientras estábamos en la mesa del comedor tomando desayuno, sonó el teléfono de Dominik. Estaba tan tranquilo y silencioso que me sobresalté por el timbre.
Él sacó el teléfono y, luego de ver la pantalla, me dijo:
—Es Jasper —yo asentí y él descolgó la llamada.
—¡Dominik! —Jasper hablaba tan fuerte que podía escucharlo incluso a través del auricular.
Dominik hizo una mueca y alejó un poco el aparato de su oído.
—Jasper —respondió sonriendo—. ¿Cómo has estado?
—A que te olvidabas.
La expresión de Dominik fue épica.
—Puedo haberme olvidado de muchas cosas —murmuró al fin, como quien no quiere la cosa.
—¡Mi cumpleaños, tonto! Tienes que venir.
—Si me acordaba de eso, Jas —le respondió con elocuencia, mirándome de reojo. Yo bajé la vista y me metí otra cucharada de careles en la boca, tratando de no sentirme como una espiona a pesar de que él no había hecho nada por bajarle el volumen a la llamada—. Siempre me acuerdo, es solo que... estoy en Washington —confesó.
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Morir Mintiendo © Libros I y II
العاطفية🏆 FINALISTA DE LOS PREMIOS WATTY 2021 Entre el amor y la venganza, ¿cuál destruye más? Los padres de Violeta fueron asesinados frente a ella cuando era una niña, teniendo que vivir con el trauma de sus muertes... y de lo que vino después. Ahora tie...