Esclavos del Destino. Sueños Rotos.

Cadena 36

Sueltenme!!! -Un grito se escuchó en la habitación.- Sueltenme bastardos. ¡Ahora mismo!

Misaki iba aparentemente tranquilo, pues caminaba con paso firme. Ryuichi iba observando, tratando de entender el miedo que los hombres de Misaki tenían hacia su amo, pues se veía tranquilo. Incluso su mano derecha Kirishima y el mismo Mishell mantenían una distancia prudente de Misaki.

Supongo que Takaba ya está en el lugar ordenado. ¿Verdad, Dhenaly? -Misaki habló tranquilo, pero noto el estremecimiento de su gente, incluso Mishell se mantenía alerta.-

-Trago en seco, mientras trataba de mantener calmado su ritmo cardíaco.- Así es, mi señor. Tal como lo ordenó.

Bien, ten mi bastón. Jugaré un rato. -Lanzó el bastón, viendo que era atrapado por Dhenaly, tal cual lo esperaba.- Trae un sedante y dile a Gabriel que lo quiero ver aquí mañana por la noche, también encárgate que muevan a Asami-Sama a mi mansión, que mi padre llegue en dos semanas, asignarle el caso de investigación. Con eso lo mantendré alejado por un tiempo.

Como ordene, amo. -Dhenaly se inclinó y salió lo más rápido posible, pues no quería ver a su dulce amo, molesto como en el pasado.-

Misaki llegó a la habitación designada. Seguido de Kirishima, Kuroda, Ryuichi y Mishell. Ahí encontraron a un joven atado a una silla de ruedas, pero sus piernas habían sido anestesiadas y sus brazos y manos estaban perfectamente atadas para que no se mueva.

Kuroda y Kirishima estaban sorprendidos, frente a ellos se encontraban Takaba Akihito, la ex pareja de Ryuichi.
Ryuichi sentía miedo, pues había dejado a Takaba para protegerlo, y ahora estaba frente a Misaki, mano derecha de su padre.

Maldito bastardo -Takaba grito exaltado, veía al joven que estaba frente a él y le parecía la persona más débil y estúpida, pues no había visto a nadie más.-

Al amo no le hablas así, basura. -Mishell dio unos pasos al frente y golpeó a Takaba. Dos golpes bastaron para callar a esos bastardo.-

Misaki sonrió complacido por la acción de Mishell, pero vio como Ryuichi se acercaba para golpear a su mano derecha. Ryuichi iba acompañado por Kirishima, entre los dos lo golpearon. Dándole un golpe en la costilla y el otro lo pateó.

Misaki se quedó en blanco por unos segundos, pero una vez se repuso corrió a salvar a su asistente quien había sido tomado por sorpresa.

Chicos, detengan a Kirishima y a Kuroda. -Misaki ordenó mientras recibía un golpe que iba directamente a Mishell- ouch, mierda. ¿Qué demonios le sucede? Cómo se atreve a golpear a mi mano derecha.

Ryuichi se detuvo al ver la sangre en el dorso de su mano, y viendo que Misaki había recibido el golpe en la costilla izquierda, ahí fue que reaccionó. Otro hombre sometió a Ryuichi, Mishell se sentía impotente, o eso reflejaba su rostro al escuchar la voz de su amo.

¿Misaki-sama, porque se metió? -Mishell ignoró sus propias heridas para atender a su amo, mismo que sangraba y estaba acostado en forma fetal, un claro rasgo que no podía enderezarse y no le sorprendió, pues él se sentía aturdido, los golpes de Ryuichi fueron realmente agresivos.-

Llamen al doctor -Gritó una de las mujeres de la oficina que había pasado cerca del lugar.- Misaki-sama fue herido. Ayuda, ayuda.

Los gritos de la mujer se escucharon por el lugar, lo que hizo reaccionar más a Ryuichi, quien intentó acercarse a Misaki, pero fue detenido por los hombres de éste.

Eso te pasa por ser un bastardo. Asami Ryuichi me ama. -Takaba habló con dolor, pero seguro. Logrando miradas de los hombres de la oficina, tres de ellos eran sometidos, pero un hombre lo golpeó nuevamente.-

No me importaría morir, pero con mi amo, no te metes. -Este hombre aplicó un paralizante a la columna de Takaba, claramente era un experto.- Veremos si te acepta ahora. -Se inclinó y susurró a su oído- Te violare hasta que desees morir, te dejaré paralítico de por vida y sin deseos de vivir, osaste insultar a mi amo y pronto en señor Ryuichi sabrá que tu lo vendiste a sus enemigos.

La habitación se quedó en completo silencio. Misaki se había dormido para calmar el dolor, no sólo fueron los golpes recibidos, sentía mucho dolor desde que se levantó por la mañana, así que todo se le había juntado.
Pasaron unos minutos y llegó el doctor, él y su equipo lo trasladaron a las salas médicas con camilla, para este instante, Takaba había sido sedado.

Esto es malo, vendare al joven Misaki, pero mañana deberán llevarlo para hacerle una radiografía. El golpe fue duro y aparte su condición actual lo hace un poco más débil ante esos ataques. —El doctor había llegado lo más pronto posible ante la llamada de una de las secretarías del joven Misaki.-

Misaki se había desmayado por el dolor. Ryuichi veía con preocupación al joven, no habría querido golpearlo. Pero sé interpuso. Demostrando así que él prefiere a su gente sobre una posible amistad con él.

¿Cómo fue que se cayó el joven amo? —Preguntó el doctor, pues él se preocupa auténticamente por Misaki, él ha estado a cargo de la salud de Misaki desde hace varios años ya.-

El joven heredero lo golpeó. —Respondió uno de los hombres, ya que habían dormido a Mishell para que lo atendieran.-

Entiendo, supongo que una caída hubiera sido peor. Pero insisto en que se debería cuidar más. —El doctor terminó de vendar a Misaki, le aplicó un desinflamante y aplicó un poco de técnicas de su familia para ayudar a su joven amo.-

Tiene varios problemas últimamente, el señor Fuyuhiko apareció y encontramos cinco cuerpos y robaron un cargamento importante. —Explicó el hombre que acompañaba a Misaki y a Mishell-

Podemos mantenerlo vendado por un tiempo y darle medicamentos fuertes por la noche para que yo le dé un masaje. 

Bien, dejaré todo preparado. —El doctor salió de la sala, debía preparar las cosas.- Aunque francamente no deben confiarse. El joven amo, es pequeño pero muy fuerte, aunque eso no evitará que pueda quedar paralítico de por vida, los sedantes y analgésicos son peligrosos para él, estando en ese riesgo.