él era sólo un chico con el corazón quebrado, roto aún no.
› contenido homosexual : tae bottom - koo top
› short-story. vocabulario vulgar, comfort y fluffy
› portada & banner realizados por : KC_Y055
adaptación. prohibida la...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Todo se miraba más brillante desde la perspectiva de Taehyung esa noche.
Todo a su alrededor parecía estar inmerso en una gran sensación de alegría y despreocupación. Él mismo parecía estarlo ahora, y estaba muy feliz de sentirse así por primera vez en mucho tiempo.
Miró entre el mar de gente que se abría paso frente a sus ojos, todos en la pista de baile con luces y sonido alto, algunos estaban conviviendo en mesas, sus hyungs estarían divirtiéndose también, en alguna parte de la fiesta.
Taehyung suspiró. Ignoró el olor a cigarro, la presencia del alcohol en todo el lugar, los gritos, risas y extraños sonidos... Sólo se concentró en él mismo dentro de su cabeza, para no perderse. Se sentía, bien.
Desde que se atrevió a confesarle a Jungkook lo que había sucedido entre Namjoon y él, sus días habían marchado con más tranquilidad. Él no creía que al contar aquello se liberara algo en él, pero así fue. Quizá fue el hecho de que Jungkook fue su diario y el que lo consoló. Sí, quizá fue eso.
Taehyung estaba seguro de que Jungkook estaría dispuesto a escucharlo, siempre lo ha estado. Y eso es algo tan admirable en una amistad. Él ni siquiera le juzgó o cuestionó su actuar, no le dijo lo que él había pensado que dirían todos, al contrario, en lugar de señalarlo como un idiota que se había dejado envolver cómo muchachita ingenua, lo animó y lo hizo sentir mejor. Taehyung estaba demasiado agradecido con él. Y ahora que por fin su humor había cedido un poco y estaba de buen ánimo, había aceptado asistir a la fiesta de cumpleaños de la hermana de Jimin.
Estaba consciente de que Namjoon estaría presente en la fiesta, y no por eso se negó a cumplirle a la insistencia de Hoseok de que asistiera a la fiesta, porque en realidad Namjoon estaría presente siempre. Son compañeros, se supone son amigos, quizá ex amantes o lo que sea, pero no iban a dejar de verse, y eso era algo con lo que tendría que aprender a lidiar.
Taehyung sólo quería olvidarse de eso. Para eso estaba aquí, para olvidarse de todo un momento y dejar de pensar. Pensar algunas veces es el peor camino, y más para alguien con el corazón quebrado.
— ¡Hey, Taehyungnie! — Taehyung escuchó que alguien lo llamó, pero le costó trabajo ubicar de dónde provenía el llamado. Sonrió cuando divisó a un sonriente Seokjin caminando hacia él, y a su lado un risueño Hoseok con un vaso en mano.
— ¿Cómo va todo, TaeTae? — Hoseok preguntó, mostrándose alegre frente al menor. Era el co-anfitrión de la fiesta por ser su hermana la cumpleañera, así que debía estar al pendiente de que todos los invitados estuvieran bien, en especial los que son sus amigos.
— Bien, todo bien. — Taehyung sonrió reflejando sus palabras.
— Muy bien, debes estar bien porque es la fiesta de mi hermana y ella insistió en que vinieras.
— ¿Ah, si? — Taehyung sonrió suavemente.
— ¡Ah, Hoseok! Asustarás a Taehyungnie, no le hables de chicas...
