Mark Tomlinson falleció en circunstancias misteriosas y Louis tiene que asumir la dirección de la imprenta familiar Tommo's Books, junto con sus hermanos trabaja para pagar sus deudas financieras pero no sabía sobre los turbios negocios de su padre...
Fue a las nueve con diez que el teléfono de la residencia Tomlinson sonó, alertando a la persona más cercana a contestar.
- Buenas noches, ¿quién habla?
- Buenas noches, llamamos del hospital Saint Thomas de Westminster, el señor Mark Tomlinson ha sufrido un accidente de auto – la llamada se mantuvo en silencio durante unos segundos en los cuales solo se escuchaba la respiración de la matriarca de los Tomlinson - ¿Hola? ¿Logró escucharme?
- He... yo... sí – Johannah sostenía el teléfono con fuerza, intentando que sus piernas no flaquearan por la mala noticia
- ¿Es familiar directo?
- Sí, soy su esposa
- Bien, en estos momentos está siendo atendido en emergencia, le brindare los datos, un momento por favor
Louis el mayor de sus hijos la llevo al hospital, ambos preocupados por el estado de Mark. Al llegar hablaron con una enfermera que los llevo con una señorita de recepción.
- Sí, aquí está el señor Tomlinson - dijo señalando la pantalla del computador - está en sala de emergencias con el Doctor Malik... - Johannah al escuchar esto intento pasar hacia la puerta de las salas de emergencia, pero la enfermera la detuvo.
- ¡Necesito ver a mi esposo!
- Señora, debe esperar al doctor – Johanna hizo un gesto de molestia hacia esta y tomo asiento en la sala de espera
Louis se quedó ahí esperando junto a su madre, no les brindaron más información, solo indicaron que debían esperar que el doctor Malik saliera y les comunicara la situación de Mark.
- Mark Tomlinson – se escuchó decir, ambos Tomlinson se acercaron al joven doctor
- Johanna Tomlinson, soy su esposa ¿Cómo está?
- Lo sentimos, hicimos lo que pudimos...
- ¡No! No diga eso
- En el accidente sufrido provoco un traumatismo craneal cerrado, no había posi...
Louis se mantuvo estático escuchando la explicación en términos médicos de la muerte de su padre, pero esta se perdía por los llantos de su madre, reaccionó cuando su madre lo abrazó, acallando sus gritos de dolor en el pecho de su hijo. Había perdido a su padre la única persona que deberás lo entendía, su mejor amigo, de todos los que le rodeaban era el único que lo notaba, el único que en serio lo apoyaba, más lo que no sabía aquel chico de 23 años y eran los secretos de su padre.
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Ya habían pasado dos meses exactamente de la muerte de su padre, su familia no estaba bien, ¿Qué sucedía? Deudas, al parecer esa hermosa burbuja de cristal que era su felicidad llego a hacerse pesada y choco abruptamente contra el suelo, acabando así con los sueños de fiestas de cumpleaños, viajes, escuelas privadas, remodelaciones de la casa, y alguno no tan irrelevante como las anteriores mencionadas la hipoteca y préstamos del banco hechas para la tienda de libros.
