Capítulo 6

8.3K 287 3
                                    


-Si que tiene sueño profundo la tía

Me acurruqué más entre las sábanas al escuchar aquella voz. Estaba teniendo un buen sueño.

-Vamos Ana, despierta

Me giré de espaldas a aquella voz molesta. Escuché unas risas por la habitación, pero por nada del mundo me levantaría. 

-Te está ignorando un poco

-Pues despiértala tú

Algo se hundió a mi lado, pero no me importó en absoluto. ¡Mario Casas me estaba pidiendo matrimonio! Oh sí, el sueño más feliz de mi vida. 

La imagen de Mario arrodillándose ante mí se esfumó y cada vez estaba siendo más consciente de lo que pasaba a mi alrededor.

-Vamos, pareces una marmota

Obligada, abrí poco a poco mis ojos y vi la silueta del jugador canario sentado en la cama con una de sus manos en mi muñeca. Dejó de zarandearme cuando vio que había abierto los ojos.

-¿Qué hora es?

-Las ocho y media de la mañana- habló lo que reconocí como la voz de Ferrán

-Ah

Dicho esto volví a cerrar los ojos y me acurruqué otra vez. 

Espera. ¿Qué había dicho? ¿Las ocho y que...?

Me incorporé de golpe y los mire con mala cara.

-¿Por qué me despertáis tan pronto? Yo no tengo que entrenar

-Luis Enrique ha dicho que desayunemos juntos

Bufé y me desesperecé haciendo ruidos extraños. Ferrán y Pedri se rieron un poco.

-Yo no estoy preparada para estos horarios

Los dos me miraron sonrientes y salí de la cama. Anduve hacia la puerta y me paré porque ambos jugadores no venían conmigo.

-¿Qué os pasa? ¿Se os han paralizado las piernas de repente o qué?

-¿Vas a ir en pijama?

Me miré a mi misma. Pantalones cortos de chico que le había robado a mi primo mayor y que me quedaban por la rodilla y una camiseta ancha negra. 

-Ya luego me cambiaré

Los tres juntos bajamos al comedor del hotel encontrándonos con Morata, Dani, Koke y Unai. ¿Por qué me habían despertado si faltaban más de la mitad de jugadores?

Me senté junto a Morata y apoyé mi cabeza en la mesa. Mi cara de sueño era notoria.

-Veo que tienes muchas ganas de empezar el día

-No lo sabes tú bien

Morata se rio a mi lado y yo cerré los ojos.

-Ya te acostumbrarás

-Bueno pues ese día no será hoy

Después de unos minutos me levanté y fui a coger algo para desayunar. No era una chica de desayunar, pero un zumo de naranja al menos no haría daño. Fui hasta la máquina y esperé hasta que se hiciera. De reojo vi como alguien se ponía a mi lado.

-¿Ya estás más despierta?- dijo Pedri a mi lado

Negué con la cabeza y cogí mi zumo. Escuché como reía a mi lado y yo le sonreí. Fuimos juntos hasta la mesa y me senté junto a Morata de nuevo. Pedri se sentó a mi derecha. 

Los jugadores empezaron a hablar de cosas sin importancia. Yo al principio no hablé mucho pero después me uní y no paramos de reír. Casi escupo el zumo dos veces. Podría acostumbrarme a estar con ellos desayunando y riendo fácilmente. 

Fueron bajando los jugadores que faltaban con unas caras de sueño tremendas.

-¿Qué tal Pau? ¿Con sueño?- dije mientras reía un poco

-Lo dice la que ha bajado aquí con ganas de querer morirse

Fulminé al valenciano con la mirada y este me sacó la lengua, divertido.

-Y que todavía va con el pijama

-Eso era secreto, solo vosotros lo sabíais, traidor- dije mirando al canario

Este se rio de como le miraba y me abrazo, aún riendo.

-No me toques

Traté de deshacerme de su abrazo, pero me fue imposible y al final, acabé correspondiendo su abrazo. Todos nos miraron entre risas y al final, yo también sonreí.

Todo por ti - Fanfic de Pedri GonzalezKde žijí příběhy. Začni objevovat