PRÓLOGO:

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Un chico de 16 años con ojos color oliva lloraba sin consuelo en la torre de astronomía, a él jamás se le había visto vulnerable, jamás...

Nadie llora con ese tipo de amargura sin algún motivo...

Él era Tom Riddle y horas antes la única persona a la que había amado había sido encontrado sin vida en las mazmorras del colegio Hogwarts. Era un misterio quien pudo haberla asesinado fue víctima de la maldición «AVADA KEDAVRA».

El dolor lo consumía cada vez que recordaba la última conversación con su ya difunta amada y su llanto se oía cada vez más desgarrador.

                                   ...........

Habían pasado 3 meses del acontecimiento y aquel chico ya no lloraba, sin embargo, hacía cosas más misteriosas de las que normalmente realizaba antes de la muerte de aquella joven a la cual tanto amo.

Cada noche subía a la torre de astronomía y se quedaba ahí hasta que los primeros rayos del sol salían.
Slughorn su profesor había intentado animarle un par de veces, apesar que a él la muerte de su alumna le resultaba igual de dolorosa, el motivo es que trataba de su "alumna favorita" al igual que Tom, pero hacia el mejor esfuerzo para no mostrarse tan vulnerable.

Una noche oscura y sin relevancia las estrellas brillaban con gran intensidad y Tom Riddle estaba relacionado con aquel suceso.

-Desde el cielo he oído tú rogar , aunque seas oscuridad he notado tú pesar y me ha hecho manifestarme ante ti- recitaba un astro

-Solo quiero que la traigas de vuelta- dijo firme el chico

-He llegado hasta aquí solo para cumplir tú desear... Pero solo hay una condición que si llegarás a romper sería letal- contestó el astro

-¿Cuál será?- inquirió el joven parado en la punta de la torre

-Ella renacerá pero tú nunca más la tendrás...- condicionó el astro desde el cielo...

-¿Qué pasaría si la llegará a buscar y a recuperar?- insistió el ya disgustado Tom por aquella revelación

-Eso será muy difícil y más en el camino que vas, no sabrás cuando, donde y que día renacerá... Así que nuestro trato en este momento comenzará...

Las estrellas brillaron cada vez con más intensidad hasta que aquel astro se esfumó entre las tinieblas de aquel cielo nocturno, haciendo que las estrellas regresaran a su brillar original para comenzar a ser ocultadas un poco más tarde por los rayos del sol.

El joven Tom Riddle atónito a lo que había presenciado, se quedó reflexionando y acepto esperarla incluso si pasaba una eternidad para al menos volverla a mirar.

      «UNA VIDA NO LE BASTÓ PARA
    PODER AMARLA»
  
    
        
          
       
                     

•𝐓𝐇𝐄 𝐆𝐑𝐄𝐀𝐓 𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐎𝐅 𝐓𝐇𝐄 𝐇𝐄𝐈𝐑•~ 𝑻𝑶𝑴 𝑹𝑰𝑫𝑫𝑳𝑬Where stories live. Discover now