𝐃𝐑𝐔𝐆𝐒 [Mitsuya Takashi]

14

[SOMOS TAN PERFECTOS.]
(๑•ᴗ•๑)♡

━━ El cumpleaños era algo muy importante para Mana debido que estaba creciendo y eso la ponía feliz, ella deseaba ayudar a su madre en lo que pudiera.. Mana al ser una simple niña que debería centrarse en jugar y aprender ella deseaba crecer para que su madre tuviera dinero suficiente. Takashi por su parte hacia lo que podía para hacer feliz a su madre al igual que Luna, por lo que una noche antes del cumpleaños de Mana los dos hablaron que mañana sería un día especial y demás. Por algunos motivos Mana no era de tener muchos amigos por lo que sus cumpleaños se basaban en su familia y los amigos de su hermano que siempre traían disfraces de princesas o de unicornios, si era extraño pero ellos lo hacían por la ilusión de niños que ellos no pudieron tener.

En el cumpleaños de la menor de la familia Mitsuya era hoy, todo estaba listo, globos, serpentinas y algunos stickers pegados en las paredes, la mesa estaba llena de dulces y cosas comestibles, el timbre fue sonado varías veces mientras algunas voces se oían de afuera y efectivamente de sus amigos. Mana y Luna fueron abrir la puerta seguido del mayor, ambas niñas estaban muy emocionadas pues estaba Yumei vestida de princesa al igual que ellas dos estaba acompañada de los superiores en la TouMan.

-Yuu-chaaaan.- Mana salto abrazarla con cuidado por si se caía o algo por el estilo, Takashi había quedado muy impactado al verla de esa manera pues él pensaba que sus amigos harían ese papel. -Viniste, hace tiempo no te veía.- la chica observo a su alrededor encontrándose con dos chicas más vestidas de princesas. Yumei veía de "Bella" mientras que Emma venía con la princesa llamada "Cenicienta" y Hina la cual Mana ni Luna conocían venía de "Aurora" las tres chicas venían muy hermosas mientras que lo chicos simulaban ser guardias del castillo. Yumei tenía una amplia sonrisa sin quitar el hecho que aún tenía su pierna algo mala.

-Feliz cumpleaños, Mana-chan.- Acarició la cabeza de la pequeña niña quien la miraba junto un leve sonrojo en sus mejillas para así saludar a todos mientras ingresaban al hogar. Los chicos al entrar estaban llenos de regalos demasiado uno muuuy grandes y otros de tamaño mediano, los ojitos de Mana brillaban demasiado, Luna estaba muy feliz por su hermana. La progenitora de los tres chicos que vivían ahí estaba en ese entonces tomando una ducha y arreglándose para estar presente en el cumpleaños de su hija menor.