ONLY YOU || Charles Leclerc

c i n c u e n t a y t r e s

—¡Sorpresa!–exclamó Austin delante de la puerta de Maddie.

Maddie sonrió confundida.–Austin, ¿Que haces aquí?

—Vine a sorprender a mi novia.–dijo con obviedad entrando a la habitación tomando su rostro para besar sus labios en un beso castro.–¿A caso no puedo?

—No, claro que puedes.–murmuró Maddie.

—Mads, te deje los outfits en el closeth.–salió Ethan, el encargado de vestuario de su próxima sesión de fotos.

Por un momento Maddie había olvidado que estaba con alguien más en la habitación.

—Esta bien, Ethan.–murmuró.

Miro de reojo a su novio y no parecía muy contento de haberla encontrada con alguien más.

—Austin.–extendió su mano presentándose por sí mismo.–El novio de 'Mads'.–su voz había sonado burlona.

La neerlandesa lo conocía muy bien y sabía que estaba molesto. Además que odiaba cuando los demás le ponían sobrenombres que él no aprobaba.

—Mucho gusto.–Ethan era demasiado simpático para darse cuenta lo que pasaba.–Nos vemos mañana, Mads, que descanses.

—Nos vemos mañana.–la rubia forzó una sonrisa.

Ethan salió de la habitación sin tener la menor idea de lo que pasaba en esa relación. Maddie miraba a su novio expectante de alguna reacción y para su sorpresa sólo recibió una sonrisa.

—¿Tienes que trabajar mañana?–pregunto llevando una mano hacia su rostros para apartar algunos cabellos rebeldes.

Ella asintió.–Una sesión de fotos.

—¿Y ese chico la hará contigo?

Negó.–Es el encargado de vestuario. Quiso traerme algunas opciones para mañana.

El rubio sonrió.–Muy amable de su parte.

La neerlandesa lo siguió mientras caminaba hacia más adentro de la habitación y no sabía porque, pero estaba aterrada.

—¿Te acostaste con el?–pregunto con una sonrisa que en vez tranquilizarla, le aterró.

Frunció el ceño.–¿Que?

—Que si te acostaste con el, Madelaine, no recuerdo que seas sorda.–gruño.–¿No vas a responderme? Seguro te acostaste con él, no pierdes ninguna chance.

—No entiendo a que viene esto, ¿por qué me acostaría con Ethan?

Él soltó una carcajada llena de amargura.–Lo mismo me pregunto yo, ¿por qué mi novia se acuesta con otros chicos cuando yo vengo como idiota a sorprenderla?–gritó haciendo que Maddie se estremeciera.