c u a r e n t a y u n o

3K 176 2
                                    

MADDIE SE ENCONTRABA en la cocina del airbnb cuando escucho como la puerta principal se abría y se cerraba en cuestión de segundos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


MADDIE SE ENCONTRABA en la cocina del airbnb cuando escucho como la puerta principal se abría y se cerraba en cuestión de segundos. Eso solo se podía significa que Charles había llegado, por fin.

—Lo siento, se que te pedí que me esperaras y seguro esperaste una eternidad, pero no pude convencer a mía de irme antes.–hablo muy rápido y un poco nervioso cuando vio a la rubia de pie en la cocina.

Maddie sonrió porque era la primera vez que veía al monagesco tan nervioso ante ella, como si temiera que estuviera molesta y eso le causaba gracia, pero la verdad no lo estaba. Ella entendía que había ganado una carrera muy importante y por más que ambos querían celebrar juntos, él debía celebrarlo con su equipo y estar en reuniones.

—Bonito, está bien. Yo entiendo.–murmuró Maddie acortando la distancia colocando una mano en su hombro para calmarlo.

—Aun quiero celebrarlo contigo.

—Pues me lo debes luego de esperarte desolada en el paddock.–bromeó.

—Lo siento, en serio.–la miro con ojos de perrito.

—Deja de disculparte.–pidió ella sonriendo.

—Voy a ducharme para que podamos celebrarlo, solo tú y yo.

—De acuerdo.–accedió.–Los chicos están jugando cartas afuera, nosotros podemos ir al balcón en mi habitación.

—Perfecto.

—Te esperaré arriba con champaña, como todo un campeón.–mencionó con gracia.

Charles soltó una carcajada y se contuvo de acortar la poca distancia que había entre ellos y besarla para que supiera lo loco que estaba por ella.

—Me parece una genial idea.–murmuró para luego acercarse a su oído para susurrar algo.–Tal vez con un poco de champaña Cristine aparezca y me deje besarte.

Maddie se estremeció no solo por tenerlo tan cerca sino por su aliento contra su piel y sus manos en su cintura.

—Vete.–murmuró riendo.

—No te haré esperar.–aseguró él.

El ojiverde se fue escaleras arriba luego de besar la mejilla de la neerlandesa juguetonamente, haciendo que ella ocultara una sonrisa mordiendo su labio inferior o eso creía ella porque cuando sus amigos entraron a la cocina notaron la sonrisa de enamorada que trataba de ocultar.

ONLY YOU || Charles LeclercDonde viven las historias. Descúbrelo ahora