𝘿𝙀𝙎𝘿𝙀 𝘾𝙀𝙍𝙊 | k.d

U n o.

ᴵᶻᵘᵏᵘ'ˢ ᵖᵒᵛ

He estado sentado aquí desde hace minutos, quizás horas.

Se supone que él debía llegar a las 16:00hrs.

Suspiré cansado, levantándome con cuidado de la pequeña manta que había colocado en el piso de la azotea, intentando no botar nada de lo que había preparado anteriormente.

Di una última mirada a mi celular antes de apoyarme en el barandal metálico, eran las 19:30hrs, había pasado tres horas y treinta minutos sentado en ese incómodo y frío suelo para nada.

Con rabia, levanté la manta por un extremo haciendo que los vasos de vidrio se quebraran por completo, derramando las bebidas que compré y la comida de los pequeños platos naranja, las velas y los petalos de rosa perfectamente acomodados también salieron volando a otra parte, por suerte el jugo fue suficiente para que el fuego de las velas se apagara y no se extendiera.

—Un picnic para celebrar— me dije, echando una última mirada al desastre que había quedado en el piso. —, menuda estupidez...

Suspiré de nuevo cerrando la puerta detrás de mi, apresurado en bajar las escaleras para cambiarme y preparar todo para mi viaje con All Might mañana en la mañana.

Era un viaje sumamente importante,  pues conocería otra de las mejores escuelas de héroes del país y a uno de los directores de la misma, era amigo de All Might y le comentó que quería conocerme. Por lo que me ha comentado es una escuela sumamente prestigiosa y con un reconocimiento internacional muy alto, estaba emocionado, ya que si todo salía bien podría obtener una beca para poder terminar mis estudios allí.

Me sentía estresado y un poco frustrado también, no sabía exactamente cuánto tiempo iba a estar fuera de la academia y, por ende, sin ver a Kacchan, se supone que ese pequeño picnic era una bonita manera de despedirnos por un tiempo indefinido, pero de nuevo, él no llegó a la cita que llevaba recordándole desde hace semanas.

No era la primera vez que lo hacía, aunque no estaba seguro si sería la última.

Pasé una mano por mi cabello intentando no hiperventilar, la ansiedad me estaba comiendo vivo al igual que la impotencia, por pequeño que parezca, puse todo mi esfuerzo en esa sorpresa para demostrarle a Kacchan que realmente me importa, y de nuevo todo se fue al caño.

Ni siquiera sabía cuándo sería la próxima vez que lo vería luego de hoy, o si habría una próxima vez.

Empecé a escuchar gritos eufóricos viniendo de la sala común de los dormitorios una vez entre a ellos, con un enojo desmesurado creciendo desde el fondo de mi pecho me fui acercando hasta el lugar donde creí que estos mismos eran originados.

Faltando unos cuantos pasos para entrar a ella, pude distinguir su voz. Estaba insultando a Denki y Sero por "haberlo hecho perder".

Me acerque lentamente hacia ellos, el sofá grande era ocupado por Mina, Denki, Sero, Momo y Jirou, estaban sentados uno encima de otro disfrutando de una noche de videojuegos y comida chatarra, como era habitual en ellos. Kirishima estaba de pie riéndose a viva voz de Kacchan, quien también estaba de pie frente al gran televisor con el control de la consola en la mano.

—¡La próxima partida voy a partirte el trasero, ya verás!— gritó enojado hacia Kirishima, acercándose a él.

—¡Solo si logras ganarme!

Kirishima se abalanzó hacia el, abrazándolo por los hombros mientras Kacchan sencillamente intentaba disimular su risa escondiendo su cara en el cuello del más bajo.

Tragué saliva duramente.

El ardor en mis ojos me avisaba que las lágrimas venían en camino.

El sudor en mis palmas y mi espalda me avisaba que los espasmos del llanto estaban por llegar.