Hija Del Pecado

Capitulo 60

Atónito, escucho una pregunta.

—¿Está preocupado por mí?

—¡...Por supuesto!

Se las arregló para volver en sí y respondió rápidamente.

Porque ahora, era más importante convencer a Letticia que la voz extraña.

Letticia pensó, mirándolo fijamente.

'Porque yo vivo, hay días como este'

¿Cómo puede Barnet, que la odiaba tanto en el pasado, preocuparse por su integridad?

No podía creerlo aunque lo vio con sus ojos.

Fue sorprendente y exquisito, pero al mismo tiempo, desgarrador.

'Es tan fácil. ¿Cómo diablos fue tan egoísta en el pasado?'

El pasado que tuvieron que sufrir los inocentes del principado fue, una vez más, lamentable.

—Gracias por preocuparte por mí. Pero esta vez, haré lo que yo quiero

—¡Su Excelencia!

—Dije que me devolverías el favor. Me agradeciste, me agradeciste por salvar a todos

Una suave sonrisa se formó en los labios de Letticia.

—Ayudar a todos es mi único deseo

Ante esas palabras, el rostro de Barnet se distorsionó.

Letticia se levantó y se dio la vuelta sin esperar su respuesta.

Yulen, que estaba caminando mientras los veía cerca, se acercó rápidamente.

—Dejaste caer tu bufanda

—Ah... gracias

Letticia sonrió suavemente, tomó la bufanda gris con mucho cuidado y se la coloco.

—Yulen, Barnet tiene un problema con su pierna

—¿Es eso un problema?

—La herida que tenía antes de llegar al Imperio no ha sanado. Su situación es bastante grave

—¿Condicion grave? porque sus piernas tan de repente...

Los ojos de Yulen se agrandaron mientras miraba a Barnet avergonzado.

Ahora ve que Barnet cojea levemente en una pierna.

'Increíble'

Estaba apenado.

Estaba seguro de que ayer lo vio corriendo con esa pierna.

—Escondió la herida para no molestar a Su Alteza

—Quizás este chico...

Al darse cuenta de la verdad, distorsiono su rostro.

Se dio cuenta de que Barnet estaba a punto de perder la pierna por orgullo.

Si no fuera porque Letticia estaba presente, habría corrido y le habría dado una bofetada en la cara.

Yulen rápida y cortésmente inclinó la espalda.

—Muchas gracias, se lo informaré a Su Alteza tan pronto como regrese

Dijo gracias, pero al mismo tiempo estaba desconcertado.

¿Cómo vio Letticia de la pierna herida de Barnet que nadie del Principado había notado?

Antes de responder a la pregunta, Letticia dijo con una sonrisa.