Chanyeol reflexionó sobre la idea por un momento, Yoochun tenía un punto muy válido. Además, decidió que si iba a verse obligado a ir a un aburrido espectáculo histórico, el chico que lo había estado volviendo loco durante la semana pasada también debía ser sometido a la tortura...

— Bien.— Su tono de voz una vez más caía a su monótona normalidad.— Baekhyun vendrá conmigo.—

— Hablando de él, ¿ha recuperado su salud lo suficiente para que podamos discutir los términos de su pago?.— Preguntó Yoochun.— Sé que no te gusta tenerlo a tu alrededor, así que supongo que entre más rápido se pueda negociar con él, más rápido puedes dejarlo ir.—

— No creo que esté totalmente recuperado aún.— Comentó Chanyeol suspirando.— Físicamente está mucho mejor, pero creo que el chico podría tener algún tipo de trauma en la cabeza. Posiblemente una leve amnesia. Tal vez incluso demencia.—

— ¿Amnesia? ¿Demencia?.— Yoochun enarcó las cejas.

— Hace tres días Baekhyun se quemó con agua caliente, ya que no sabía cómo funcionaba la ducha. Ayer lo encontré caminando por ahí, con una de mis viejas corbatas atada alrededor de su cabeza, riéndose y diciendo que era su aureola. Además, él todavía se niega a usar ropa de verdad. Sólo va todo el tiempo llevando esas camisas viejas de vestir que dejaste para él.— Explicó. Yoochun había reprimido una carcajada. Byun Baekhyun parecía todo un personaje. Un poco demasiado inocente para ser un chico de 19 años.

— Tal vez sólo está teniendo un tiempo difícil de ajuste. Dijo que ésta era la primera vez que estaba en Seúl.—

— Posiblemente, pero como sea. Iré a buscar a Baekhyun y le diré que me acompañe ésta noche.— Agregó el hombre de pronto de pie, haciendo a su silla girar con fuerza.

— Está bien, entonces. Oh, y también quería hablar de... — Las palabras de Yoochun se apagaron cuando se dio cuenta de que Chanyeol ya había dejado la oficina, ni siquiera se molestó en escuchar cualquier otra cosa que su abogado quería decirle.— Maldita sea.— Susurró, apoyando la espalda contra la pared de la oficina.

¿Estaba tan apurado por encontrar a Baekhyun? Parecía que la alegría constante del chico estaba teniendo algún tipo de efecto sobre su jefe de corazón frío... y Yoochun no podía decir que era algo malo en absoluto. 

— Bueno, supongo que sólo tú y yo quedamos, mi pequeño amigo con trasero de pato.— Le dijo Yoochun al lindo ángel de madera que tenía en su mano.

***

Baekhyun se quedó mirando a la gran escalera con ferviente emoción. Era como todo lo demás en la mansión, chapada en oro y demasiada opulenta para el bien de cualquiera. Sin embargo, en la mente de ex ángel, la escalera tenía una cualidad redentora, la cual era la longitud de sus pasamanos brillantes. Desde la primera vez que Baekhyun había visto los pasamanos, había sido golpeado de inmediato con un insistente pensamiento.

"Tengo que deslizarme por los pasamanos." 

Obviamente no había escaleras en el cielo, pero Baekhyun había observado los suficientes niños humanos resbalándose por los pasamanos y siempre había querido intentarlo él mismo. Y ahora la gran longitud de oro reluciente era demasiado para que el joven la resistiera. Su mente estaba llena de visiones de bajadas por los pasamanos, ganando velocidad suficiente para ir tan rápido como el coche de Chanyeol. Sólo el pensamiento de tal hazaña, había hecho a Baekhyun temblar de la emoción.

— Bueno, no hay moros en la costa.— Susurró para sí mismo, girando la cabeza para asegurarse de que nadie se acercara por el pasillo. No estaba muy acostumbrado a las normas de la casa aún, pero estaba seguro de que deslizarse por el barandal de la escalera principal de la mansión, lo más probable es que fuera contra las reglas. No es que las reglas hubieran detenido a Baekhyun alguna vez antes. 

El sonido de una campana ↬ ChanBaek ↫Where stories live. Discover now