; 𝗟𝗢𝗨𝗗² ─ taegyu )

ᴄʜᴀᴘᴛᴇʀ ɴɪɴᴇᴛʏ ᴛʜʀᴇᴇ

Su madre sonrió con alivio cuando se volteó hacia ella, se acercó unos pasos hacia su hijo hasta quedar frente a frente, Taehyun estaba incómodo.

—Tocaste muy bien, Taehyun. — dijo la mujer, el pelirosa asintió como agradecimiento. — Ese chico te opacó bastante, pero yo te vi.

—¿Qué chico?— Taehyun no iba a permitir que trataran a Beomgyu como "ese chico", su madre sabía quien era, era absurdo.

—Ya sabes... el mudo.

—Ya no es mudo, señora. — se metió Yeonjun en la conversación, apoyó su antebrazo en el hombro de Taehyun recargándose sobre él, y el pelirosa lo hubiera apartado pero no quería hacerlo frente a su madre.

Quería demostrarle que tenía apoyo, que no estaba solo y que frente a sus amigos ella no haría nada.

—Hola, tú... ¿Yejun?

—Casi, pero lo acepto. — dijo el rubio y Taehyun sonrió para no reír. — Yeonjun, ¿cómo está, señora Kang?

La rubia sonrió, se notaba incómoda por una charla tan poco formal con ese chico.

—Bien, bien, gracias. ¿Podría hablar con Taehyun?— la pregunta no sonó muy amable. — ¿A solas?

—Puedes hablar conmigo estando ellos presente. — el pelirosa se encogió de hombros.

—¿O son demasiados gays juntos, para usted? ¿El arcoíris no la deja hablar bien, no?

—Yeonjun. — murmuró Soobin para que se callara, Taehyun intentó aguantar la risa.

La señora Kang pensaba que todo aquello era una gran falta de respeto.

—Bien, si lo va a poner tan difícil. — murmuró la rubia, sus ojos fueron hacia su hijo. — Venía a hacer las paces contigo, Taehyun.

Los tres jóvenes alzaron las cejas, sorprendidos.

—Entiendo que no fue tu culpa hijo. — la mujer sonrió de forma casi maternal. — Yo te crié bien, temo que fueran tus juntas lo que te cambió, Taehyun... No te puedo culpar de las juntas incorrectas, hijo.

Yeonjun y Soobin se miraron, el mayor de los dos iba a pedir el primer turno para golpearla, pero la mujer continuó hablando.

—Y bueno, ese chico, ya sabes y... ¿te pintaste los labios?— la pregunta sonó con asco.

—No, yo no, Beomgyu sí. — dijo el pelirosa, su voz sonó molesta. — Ya sabes, mi novio, ese chico.

—S-Sí, Taehyun... ¿no te das cuenta que ese chico te manipula?

—¿Beomgyu manipular?— preguntó Yeonjun.

—Por eso quería una conversación privada...

—O quizás para encerrarlo de nuevo. — comentó Yeonjun, a lo que la rubia frunció el ceño. — Privación de la libertad, es un delito, podría estar en prisión.

—Bien... Taehyun, vi como ese chico en el escenario te obligó a tomar su mano y te besó sin tu consentimiento... Si eso pasó frente al público no quiero imaginar lo que debe manipularte y obligarte a otras cosas en privado.

—Sí porque a Taehyun no le gusta cu-

—No es el momento, Yeonjun. — La voz enojada y grave de Taehyun lo hizo callar y bajar la cabeza. — Si vienes a decir estupideces, puedes irte. — dijo con desprecio hacia su madre.

—No, no, Taehyun, no comprendes. — la mujer se acercó a él un paso más. — Te estoy dando una oportunidad de volver a casa, Taehyun, lejos de todo esto que no eres, hijo.

—Sí lo soy.

—Te han lavado el cerebro. — la mujer suspiró. — Es difícil, pero no imposible, Taehyun, ya me encargué de que ese chico no vuelva a molestarte, sólo queda-

—¿Qué?— Taehyun enrojeció de furia. — ¿Qué le hiciste?

Taehyun miraba a la mujer con furia, Yeonjun y Soobin se miraron con miedo y el rubio se separó del mayor, escondiéndose detrás de la silla del menor.

—Eres libre, Taehyun. — la mujer sonreía ampliamente, quiso abrazar a su hijo, pero el pelirosa la apartó bruscamente y salió corriendo rumbo a los baños.

a las piñas gente🤺