Capitulo 5. Normandia

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Volví en mi cuando Alejandro me golpeo con el pie para que formara con ellos, me levante y me coloque justo al su lado. Lo mire mal haciéndole saber que su gesto no me agrado nada, pero el solo se encogió de hombros.

Dirigimos la mirada al frente como todos hacían, en posición de descanso atendiendo a las instrucciones del  Teniente. Nuestro maravillosos pilotos se retrasaban y aun no sabíamos mas que eran veteranos ya en el pacífico, por eso contaban con ellos para esta misión.  Mientras tropas yankees e inglesas junto a francesas (pues habían huido de Francia cuando hitler los invadió) desembarcarían en las costas de Normandia mientras que la unidad aerotransportada, nosotros, seriamos lanzados en un pueblo ocupado por nazis y como no, debía ser nuestro para que aquellos que sobrevivieran a el desembarco pudieran recobrar el aliento en aquel pueblo. Genial..

-Bien, soldados os presento a Christian y a Gerald recién llegados fe el pacífico.- Alce mi cabeza. ¿Gerald? ¿GERALD?

Alejandro y yo nos quedamos mirando a Gerald, estaba tan cambiado. Estaba mas alto, su cuerpo mas tonificado y tenia puntos en una ceja, ojalá estuviera muerto el hijo de puta que rompió su ceja. No pude ver mas pues aun seguía siendo bajita y estaba en la cuarta fila.

Mientras el teniente los presentaba yo me quede viendo como el parecía otro, sus gestos, todo...ha cambiado...mucho...  Ojala no se haya olvidado de mí. Mire al suelo evitando que las lágrimas salieran de mis ojos ...

-¿Eric?-pregunto Alejandro zarandeandome.

-EH?- pregunte mirándole alzando la mirada a el, ya todo el mundo volvía a sus puestos para comenzar a ponerse los paracaídas y las mochilas.

Basilone y Antonio estaban en donde nos encontrábamos antes intentando tomarse esas pastillas mientras Alejandro tiraba de mi brazo. -¿A donde vamos tío?

-A reencontrarme con un viejo amigo.-Decía mientras de dirigía a uno de los pilotos, Gerald, el cual conversaba con el otro que era moreno y muy guapo, por cierto. -Sargento.-Dijo cuando quedamos a su lado haciendo los dos  en saludo militar.

Gerald se giro a nosotros.- descanse sold...¿Alejandro?-Decía mientras lo miraba atónito. Sin decir mas nada se fundieron en un abrazo. O dios mio, me muero por estar en sus brazos. Mis lágrimas no aguantarían mas la tortura de pensar que estaba muerto....y tenerlo a excasos dos metros de mi y ni tocarlo. Antes de que terminaran el abrazo me gire y fui detrás de uno de los coches militares, ahí sequé las lágrimas que se escaparon.

Rápidamente me reincorpore a mi compañía y mis compañeros Basylon y Antonio me ayudaron con el paracaídas y los demás accesorios que pesaban como un muerto.

-y llego la hora.-Decía Basylon. Puse una mano sobre su hombro.

-Tranquilo, todo ira bien, volveremos a cada juntos, lo prometo.- Le dije segura.

Alejandro se acerco junto a sus compañeros, Gerald y Chris. Evitaba las miradas con Gerald, era obvio que podría descubrirme.

-Chicos, os presento a mi mejor amigo de  New jersey, Gerald. Es americano que no os engañe sus rasgos.-Dijo ganándose un codazo de parte de mi vecino. - Gerald, estos son Basylon, Antonio.- los iba señalando mientras estos hacían el saludo militar a el sargento Gerald.- Y este es Eric, es de New Jersey, bueno, tiene familia allí.-Dijo Alejandro señalándome. Lo MATARÉ. No levante la mirada del suelo solamente le salude.

-es vergonzoso no?-Dijo Gerald.- que sepa que eso no le servirá en el campo de batalla, soldado.

Me mordi los labios por dentro y alce la cabeza mirándole a los ojos. Como si hubiera visto un fantasma se me quedo mirando.

-Lo tendré en cuenta.- Borde

Eso fue lo único que hablamos, en segundos ellos subieron a los mandos del avion y nosotros los paracaidistas de mano del sargento Steve subimos a nuestros aviones.

********

El viaje comenzó destino a Normandia, el sargento Steve nos avisaría a la hora de saltar. Realmente estaba nerviosa, seria la primera vez que estaríamos en el campo de batalla real, también porque volvería a perder a Gerald, yo saltaría y el seguiría por los aires.

Se empezaron a escuchar explociones cerca del avión, lo que hizo que este se tambaleara. Estamos cerca. Mire a mis compañeros, no estaban mejor que yo; algunos vomitaban en sus cascos y otros lloraban como si no hubiera mañana, que en nuestro caso pues nadie sabe. Después vi a Basylon observar una foro que Antonio le enseñaba, estaba tan orgulloso de su  familia que siempre que tenia miedo enseñaba la foto y hablaba sobre ella a todos. Después Alejandro miraba la carta, que había recibido hacia unas horas. ¿Estaran bien sus padres? Parece preocupado. Este me pilló mirándole y le sonrei para decirle que podía contarme lo que sea a lo que el en miro serio analizando mi rostro, despues me devolvio la sonrisa.
Después se acerco a mi cambiando el asiento de quien estaba a mi lado por el suyo. Lo mire sentarse a mi lado.

-¿Por que huistes cuando fuimos a ver a mi amigo?- preguntó.

-pues..-puse mi voz de macho pecho peludo.-La verdad me sentía incomodo tío y el rollo gay emocional no me va.- Reí. Pero el no reia. -¿Pasa algo?

-Pues si..-se llevo una mano a la frente. El avión volvió a moverse, esta vez con mas fuerza. -Mi vecina, que somos amigos desde prácticamente que nacimos ha desaparecido, y fue poco después de perder a su mejor amigo.-Dijo mirando al suelo. Casi me daba un infalto.- sus padres están destrozados..-Eso me rompió el alma, realmente olvide esa parte, en la que ellos sufrían. Se merecían una buena explicación, quizás si sobrevivo se lo diré en persona pero por si acaso, escribiré una carta.

-Bueno seguro que estará bien, ya sabes adolescen...-No me dejo terminar. Se acerco a mi oído, nos agarramos de los brazos pues el avión volvió a moverse. Esta vez la bomba exploto muy cerca.

-Sargento, debemos saltara YA. -Grito Gerald.

-Se quien eres, Axel -Susurro.-Elizabeth, te comprendo pero es una locura. Una puta locura. es un suicidio.-Me susurraba mientras nos preparamos para saltar. - y creeme que esta carta solo afirmo mis sospechas, esa sonrisa no se olvida.

Casi muero de un infarto en este trayecto y ni he saltado aun. -No digas nada, por favor. Tu me comprendes.-El solo afirmo y me paso lo casco para cubrir mi tupe rubio.

Preparados para saltar oíamos como los nazis lanzabas sus antiaéreos contra nosotros, sabían a que veníamos y estaban preparados. Mucha gente que no creía en dios se encomendaban a quien estuviera ahí arriba, yo simplemente le eche cara y me propuse a saltar la primera. Si lo haces antes, mejor... Mire al piloto, mi Gerard , al lado Chris parecian tener problemas, íbamos de un lado a otro, de pronto otra explosión, pero esta vez golpeo un motor del avión.

-NOS HAN DADO. NOS HAN DADO.-

-A SALTAR, ¡YA!-

Ahora no iba a saltar. Lo deje claro, si el moría yo lo haría con el aunque el no supiera quien era yo. Retrocedí lentamente entre el movimiento del avión que perdía el control hacia el suelo, Alejandro me agarró el brazo y me miro, asintiendo, el se quedaría conmigo.

Saltaron los tres primeros, pero no dio tiempo para más. No sabíamos si se  habían salvado o no.

-PREPARADOS PARA CHOCAR.- gritaron los pilotos Gerard y Chris. Inconscientemente me abrace a Alejandro (media) , caímos al suelo del avión y abrazados esperamos el golpe. De un momento a otro las voces y los ruidos cesaron quedando todo en un silencio absoluto.

¿Qué pasara?

Gracias a las personas que leen la novela, con un solo voto me dais ánimos para seguir escribiéndola .


Till the end of the line [WWII]Där berättelser lever. Upptäck nu