—Luke.

—Ashton —replicó de la misma manera y le regaló una sonrisa—. Va a ser hermoso —cruzó sus dedos y se los enseñó a Ashton.

—Cuando pensaba en mi familia, mi idea no era pagarle a una mujer para que tuviera a mi hijo —bromeó.

—Jódete.

—¿Ashton Irwin? —Un doctor leyó en voz alta, tenía una lista en las manos. Ambos chicos se apresuraron en levantarse y llegar lo más rápido que pudieron hasta él—. Ya pueden verla —sonrió y comenzó a caminar esperando que los siguiera. Hicieron un recorrido bastante confuso hasta llegar a un cuarto lleno de bebés, algunos envueltos en cobijas amarillas, otros en rosas o azules.

—¿Cuál es? —Luke se mantenía pegado al vidrio que los separaba de todos ellos.

—La primera fila, la segunda niña a la derecha —Ashton chilló al observar a la pequeña. Sus ojitos estaban cerrados pero tenía unas largas pestallas, la piel como de porcelana y fácilmente se podría confundir con un muñeco nenuco.

—¿Cuál va a ser su nombre?

—Hayley —se apresuró a decir Luke. Los ojos de Ashton se iluminaron al escuchar el nombre. La cantante de Paramore, su banda favorita, tenía el mismo nombre y jamás esperó que Luke quisiera llamarla así.

—Es un lindo nombre.

2020.

—Papi —al escuchar aquellas palabras, Ashton levantó la vista de su periódico y se le formó la sonrisa más grande que pudo haber presenciado jamás Luke.

2024.

Hayley lloraba a pulmón. Su cabello cobre estaba peinado en dos perfectas colitas hechas por Ashton. Sus ojos celestes estaban rojos y algo hinchados, combinaban perfectamente con su nuevo uniforme.

—Nena, tienes que entrar. ¡No te puedes perder el primer día de clases! Anda, saliendo te prometo que iremos todos por un helado, ¿De acuerdo? —sacó su dedo meñique, ella asintió y sacó el suyo. Ambos se apresuraron a limpiarle las lágrimas y darle un beso en cada mejilla. Sostenían firmemente sus manos mientras veían a su niña entrar corriendo a la escuela. Cuando se tropezó, Ashton comenzó a reír fuertemente y Luke lo imitó.

—¡Levantate, stay strong! —gritó. Hayley volteó a verlo con el ceño fruncido. Le sacó la lengua y volvió a retomar su camino.

2025.

—Quiero este —Hayley señaló decididamente al pequeño perro Alaska que estaba sentado en un rincón. Ashton había dicho que era mejor adoptar de un refugio que comprar uno. Y eso estaban haciendo.

—Bueno, ¿Cómo se va a llamar?

—Boobie —ambos soltaron una risa, Hayley atacó con su pequeño puño la pierna de Ashton—, ¡No sean groseros!

—Boobie suena... bien —se encogió de hombros.

                                                          *****

Estaban sentados en el parque. Tomaron una Polaroid de ellos.

2026.

Ashton mantenía cuatro fotos en su oficina en el centro de la ciudad:

1. Hayley.

2. Luke.

3. Luke y él en su boda.

4. Su familia, incluyendo a Boobie.

2030.

—Hayley tiene novio, Hayley tiene novio —cantaban al unisono Ashton y Luke. La pequeña mantenía su vista agachada, sus mejillas estaban coloradas. En sus pálidas manos tenía una rosa y algunos chocolates que un compañero de su escuela le había dado.

Straight //lashtonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora