Te Encontré [Namjin]

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Seokjin estaba de visita a su anterior hogar en el reino de Agartha, Yeonjun ya había dado a luz a un niño y fue para felicitarlos, soobin estaba agradecido con su rey y ellos también se alegraban por su reciente matrimonio.

-Gracias por venir majestad, es un honor tenerlo en su hogar- dijeron los muchachos.

-Su hogar, este lugar ya les pertenece así que solo soy un invitado más y no olviden que ustedes me apoyaron y son como mi familia- dijo para despedirse y volver al palacio.

Su corazón estaba tranquilo pero algo aún le hacía sentir inquieto, por el lazo Namjoon supo que algo andaba mal así que en cuanto el Omega llegó al palacio los guardias le informaron que el Rey requería su presencia.

-¿Me llamabas?- dijo el Omega ingresando y abrazando por la espalda a su alfa que estaba sentado.

-¿Que sucede Jin?, Quiero saber para poder ayudarte- dijo dando vuelta y haciendo que el Omega se siente en su regazo.

Seokjin mordió su labio inferior, ahora no podía ocultar sus angustias al alfa, pero en parte sentía cobijo al compartir con el todos sus sentimientos.

-No es algo que yo mismo sepa Nam, mi lado omega se siente triste, aún no se acostumbra a perder a mi padre y creo que estar cerca de mi madre afectó un poco- dijo algo apenado.

-Entiendo, no me escondas las cosas Jin, déjame ayudarte en lo que pueda- dijo el alfa hundiendo su rostro en el cuello del Omega y así disfrutar de su aroma.

-De acuerdo, es solo que me siento vacío- dijo calmado.

-No te preocupes yo te llenaré para que no te sientas vacío- dijo pícaro ganándose un golpe del Omega.

Sus manos viajaron hasta los glúteos de Seokjin y empezó a masajear, pronto la ropa salió sobrando y el despacho termino con una sesión de sexo de los Reyes.

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Namjoon resolvía algunos asuntos complicados del reino, más claro hacía entender a la mala a algunas personas que aún trataban de causar revueltas en el reino, con cada golpe los gemidos de dolor del beta aumentaban, pero parecían susurros y el rey no se inmutó, estaba estresado pues últimamente estaba lejos de su Omega y ahora que tenía tiempo al estúpido beta se le ocurre hacer revueltas, molesto siguió castigando al hombre hasta que esté pidió, rogó y suplicó por clemencia, Namjoon se cansó y dejó todo en manos de los soldados quienes tuvieron pena por el beta y lo ayudaron a ir a su celda dónde atendieron sus heridas y le aconsejaban no molestar al rey.

Namjoon tenía una cosa más que hacer y era algo grato, una vieja amiga del reino venía de visita y el como anfitrión preparaba su recibimiento junto a Yoongi.

-majestad la señorita Ahn Hye-jin acaba de llegar- dijo un sirviente con la mirada en el suelo.

-Bien, denle la bienvenida iré en cuanto pueda- dijo Namjoon mientras sonreía.

Mandó a buscar a Seokjin, en cuanto esté estuvo frente a el se levantó dispuesto a salir.

-Quiero presentarte a alguien amor- dijo el rey mientras lo tomaba de la mano y caminaba.

-Te ves feliz, debe ser alguien importante- dijo alegre de conocer más de su alfa.

-Es una amiga que tengo desde mi infancia, es como la hermana que nunca tuve- dijo.

Hye-jin estaba en su habitación analizando lo mucho que el palacio había cambiado, todo era tan fino como siempre, pero si visita se había adelantado al enterarse de la boda de Namjoon, algo que la había sorprendido y quería averiguar por si misma.

Tras las puertas de su habitación los reyes fueron anunciados y Hye-jin se levantó para recibirlos haciendo una reverencia.

-Hye-jin me alegra verte de nuevo, no esperaba que volvieras tan pronto- dijo Namjoon acercándose a la Omega y estrechando sus manos.

-Sucedieron algunas cosas y volví antes, pero temo que no por mucho tiempo- dijo claramente mintiendo, ella tenía otros planes.

-Bien, déjame presentarte a mi Omega y esposo, Seokjin- dijo presentando a ambos.

-Es un gusto conocerlo majestad, soy Ahn Hye-jin- dijo en un tono distinto.

Seokjin lo notó y supo que ella era un problema pero no dejaría que alguien le arruinara sus días, después de todo tenía el apoyo de su madre y la madre de Namjoon.

-seguramente lo es, soy Kim Seokjin, el Omega amado de Nam- dijo abrazándose al brazo del alfa, este no noto nada y solo sonrió ante la mirada tierna de Seokjin.

Hye-jin bufó a sus adentros y empezaron una conversación corta llena de preguntas triviales.

-Bueno Hye-jin yo debo marcharme, soy un rey y debo cumplir con mi deber, si necesitas algo no dudes en hacerlo saber- dijo dejando a los omegas después de dejar un casto beso en los labios de Seokjin.

-Lamento si le causé molestias Majestad- dijo la mujer a Seokjin.

Este asintió y se dispuso a salir, pero claro que debía responder.

-No es molestia si no es algo difícil- dijo para después salir.

Seokjin cumplía su deber como rey, ayudaba en los asuntos reales que podía, y realmente había realizado un excelente trabajo disminuyendo la carga para su alfa, pero mientras más progreso haya más trabajo habrá.

Hye-jin había observado de pies a cabeza al omega, la marca tan visible en si nuca la dejó inquieta, pero aún existía posibilidades ¿Cierto?, No sé rendiría tan fácil.

Jimin fue a ver a Seokjin al enterarse de la llegada de la Omega.

-Jin, ya no pasas tiempo conmigo- dijo haciendo un puchero frente a Seokjin.

-Estuve ocupado, prometo hacer tiempo para estar contigo y hobi, pero aún debo resolver algunos asuntos- dijo sonriendo.

-esta bien, por cierto¿ya conociste a Hye-jin?- dijo Jimin algo desganado.

-Si, fuimos a saludarla y darle la bienvenida- dijo indiferente.

-No confíes en ella- dijo para después dejar solo a Seokjin con la duda del porque habrá dicho eso.