El bastardo de una Maid

Danza de espadas

Hola mis queridos, hermosos y sensuales lectores aquí su querido Lordavelica con un nuevo capítulo de El bastardo de una maid, espero que estén disfrutando de esta historia y que me sigan apoyando en futuros capítulos y proyectos,  sin más que agregar comencemos.

La tensión estaba en el aire, fuera del club de ocultismo una barrera se formo para que nadie interrumpiera el encuentro que se daría, por un lado se encontraban las féminas enviadas por la iglesia, del otro se encontraba Kiba el cual veía con gran determinación a Xenovia, lo mismo pasaba con Mordred a Irina, cada uno estaba atento a lo que haría su oponente, todos estaban quietos, todos estaban a la espera del duelo.

Con los espectadores la cosa no era diferente, Rias y Sona junto con sus sequito estaban algo nerviosos y preguntándose si realmente esto fue una buena idea, Damien y su sequito mantenían la calma ellos sabían perfectamente el nivel del caballero femenino del peliplata, pero en el fondo Damien y Kuroka estaban nerviosos pues sabían cómo se ponía Mordred con el tema de las espadas autonombradas Excalibur.

Asia-Damien-san lamento que esto haya pasado y que por mi culpa Mordred-san tenga que pelear con ellas- dijo en un tono decaído con un toque de vergüenza al sentirse ella tan débil.

Damien-no es tu culpa Asia, Mordred hizo función de sus juramentos como Caballero además, esto tenía que pasar tarde o temprano-

Sona-¿de qué hablas Damien?-

Kuroka-digamos que la relación de Mordred y las espadas esas son un tema....delicado- respondió con un tono serio causando asombro y algo de nervios a todos, en medio de los peladores se puso Sebastián.

Sebastián-Si ambos están listos....COMIENCEN¡¡¡

Kiba creó a su alrededor una docena de espadas lanzándose contra su oponente el cual se dedicaba a contraatacar cada uno de los ataques del caballero Gremory.

Xenovia-no está mal para un demonio pero no es suficiente para detener nuestro poder divino- en respuesta Kiba gruño en respuesta aumentando la agresividad de sus ataques.

Por otro lado Mordred estaba en pose defensiva lista para lo que sea, mientras que Irina terminaba sus rezos y murmullos de lo cruel que era que encontró a su amigo de la infancia como un demonio que tenía que expiar sus pecados.

Mordred-oye ¿ya terminaste con tus tonterías o mejor voy a comer y vuelvo en dos horas?-pregunto molesta

Irina-moo que malo eres Demonio-san pero no te preocupes cuando te destruya junto con tus pecados serás mas amable AMEN¡¡- con esas palabras tiro de un pequeño lazo en su brazo convirtiéndola en una katana lo cual sorprendió mucho a Mordred, la katana se alargo hasta llegar a la caballero Lucifuge que solo pudo abrir los ojos como platos antes de que una cortina de humo se alzara por el ataque de la castaña.

Irina-ohh creo que me excedí pero al menos purifique su alma- los Gremory y Sitri estaban a punto de actuar al presenciar como mataron a Mordred , pero fue la mano de Damien la que los detuvo dándoles a entender que esto no había terminado, Irina quería contraer su espada a su tamaño original pero algo la detenía.

???-¿Dónde?- fue lo que se escucho de la cortina de humo que lentamente fue desvaneciéndose dejando ver a Mordred ilesa y.....¿sosteniendo la espada con la mano desnuda? Y ¿sin ningún daño?

Irina-co-¿Cómo es que no tienes ningún daño? Las excalibur están hechas para causarles daño a los demonios- el miedo y asombro en sus palabras era más que claro, pero a pesar de esto ella no recibió una respuesta más que la mirada asesina de Mordred, la cual paso a paso se acercaba a ella.

Mordred-¿Dónde la conseguiste?- pregunto calmada pero cargada de instinto asesino, paso a paso se acercaba mas a Irina y con ella su instinto le advertía sobre el gran peligro que corría provocando temblores en sus piernas, -te lo preguntare una vez mas ¿Dónde conseguiste esa espada?-